El Centro de Control de Emergencias de la Autoridad Portuaria de Valencia organizó, en la mañana de ayer, un simulacro de incendio en las instalaciones de la planta de refinados de Bunge, situada en el interior del recinto portuario.

Eran las 11.20 de la mañana cuando saltaron las alarmas, al detectarse una explosión en una de las naves de la compañía de refinados. Rápidamente, la empresa puso en marcha su Plan de Emergencias -coordinado por el Jefe de Producción de Bunge- para proteger a la plantilla y controlar el incendio hasta la llegada de más medios.

A pesar de la lluvia, los bomberos se encargaron de sofocar el incendio

Medios
Al lugar de los hechos, acudieron tres vehículos de la Polícia Portuaria y un vehículo del Servicio de Asistencia Médica Urgente, pues, ante la explosión, uno de los trabajadores de Bunge había resultado herido en una pierna. El herido fue evacuado tras recibir las primeras atenciones médicas en el lugar de los hechos por parte del personal médico desplazado.

Por otro lado, acudierondos unidades de bomberos, procedentes del Parque de la Zona Norte, encargados de sofocar el incendio provocado por la explosión.

Lugar donde se originó el fuego

Además, tres vehículos de la Polícia Portuaria se desplazaron a las instalaciones de Bunge. Los agentes se encargaron, o bien de ayudar a los empleados de la planta o acordonar la zona del fuego y sus inmediaciones.

Los asistentes sanitarios atendieron al enfermo

Protocolo de actuación
El protocolo de actuación seguido ante la “emergencia” fue, de inmediato, activar el Plan de Emergencias, rápidamente, se comunicó la incidencia al Centro de Control de Emergencias de la APV, y, una vez activo el Plan de Emergencias Interior de la Autoridad Portuaria, desde el Centro de Control se coordinó la actuación de los medios y recursos previstos, tanto para el rescate del herido y la extinción del incendio por parte del Servicio de Bomberos, así como la atención médica y la evacuación de los heridos por parte del Servicio de Ambulancia.

La Polícia Portuaria, la primera en llegar al accidente

La planta de Bunge se dedica al tratamiento y transformación de frutas, semillas, y toda clase de materias vegetales, con funciones de exportación y de importación.

Un técnico de la planta, herido

La actuación del personal, sometida a evaluación
Durante la próxima semana, tendrá lugar una reunión con todas las partes implicadas en el simulacro (trabajadores de la planta, personal sanitario, bomberos, polícia portuaria...) para evaluar el funcionamiento de los equipos, así como detectar las áreas de mejora y diseñar posibles soluciones para las mismas.

Uno de los aspectos que tendrá protagonismo será el de los tiempos. De hecho, durante toda la maniobra de simulacro, el tiempo fue controlado al milímetro para así conocer cuanto necesita el personal para reaccionar ante la emergencia o llegar (en el caso de los bomberos) al lugar del accidente, y, a partir de ahí, trabajar por reducir al máximo los tiempos.