El Presidente de la Cofradía de Pescadores de Valencia, José Ramón Domingo, recibe a Valencia Marítima cuando ya casi ha acabado su jornada de trabajo y la mayoría de sus compañeros, o se han marchado, o se dedican a vender lo que ellos llaman “el rancho”, es decir, ese pescado que se vende en subasta en el Puerto de Valencia que les ayuda a sacarse un dinero extra, que ellos consideran “necesario”.

Domingo representa a unos 80 pescadores valencianos, pero, dice, “ahora nos hemos ido a menos, antes eran 120 buques entre barcos de arrastre y artes menores. Con el tiempo el número de pescadores y el número de barcos ha ido disminuyendo”.

Obras del circuito
En las últimas semanas han sido de actualidad todos los pescadores, a raíz de todos los perjuicios creados por las obras y el acondicionamiento del Valencia Street Circuit, no obstante, asegura “desde primeros de año venimos sufriendo pérdidas económicas con motivo de este evento puesto que los consumidores se acercan mucho menos a comprar ‘el rancho’.

Sin embargo, ahora que llegan las pruebas más importantes, la situación va a ser mucho mejor. En primer lugar, porque hay un paro biológico, y, en segundo lugar porque, como los pescadores hemos cedido parte de nuestras instalaciones para la competición, nos van compensar económicamente. En ese sentido, queremos pensar que lo peor con la Fórmula Uno ya ha pasado”.

Situación del sector
Preguntado por la situación del sector pesquero, la opinión de Domingo no es excesivamente optimista “nos afecta mucho el aumento del precio del petróleo y, mientras, nuestros productos tienen igual o inferior precio. Cada día, hay más competencia por todos los productos que viene de fuera, de lejos, que no son de la misma calidad, pero se venden también. Como, por ejemplo, del Atlántico Norte. Los compradores no se fijan en las etiquetas y no podemos competir con esos precios. Hasta ahora había querido ser positivo sobre la situación de nuestro sector, pero, ahora me cuesta mucho más.”

El futuro
Respecto al futuro, Domingo considera que “si no baja el precio de los carburantes,la flota quedará amarrada. A largo plazo, si no recibimos ayudas, la pesca de bajura se va a la quiebra”. “Considero- asegura- que, a medida que la gente se jubile, las embarcaciones van a ir disminuyendo, si la gente no encuentra otro trabajo se quedará, pero, si no, no”.

Respecto a las ayudas de la Administración, Domingo explica que “no tienen ayudas de ningún tipo por parte de las diferentes administraciones, las subvenciones de la Unión Europea sólamente son para reparar naves o cambio de motores ect. no para mejorar nuestras condiciones o salarios”.

El Puerto de Valencia
El representante de los pescadores considera que el Puerto de Valencia “ha crecido mucho en los últimos años, eso se ha traducido en mayor volumen de trabajo y de tráfico, algo que ha convertido el Puerto de Valencia en un referente en el Mediterráneo. No obstante -señala- esto ha tenido sus consecuncias para los pescadores puesto que, actualmente, estamos desplazados. La pesca no le es rentable al Puerto de Valencia, somos muy conscientes de ello, y, por ello, estamos aquí arrinconados”.

“Ahora mismo -continúa-estamos negociando con la Conselleria de Agricultura y Pesca, con la Autoridad Portuaria y con ACM para ver nuestra futura ubicación. No nos conformamos en cualquier rincón alejado.

Como pescadores, nuestra preferencia, es la Playa de Pinedo, al lado de desembocadura del río. Sería maravilloso para los pescadores, pero, también, para todos los restaurantes de la zona porque podrían comprar pescado barato y de mayor calidad”, concluye.

Posible hipermercado de venta de pescado valenciano
Según el Presidente de la Cofradía de Pescadores, Juan Ramón Domingo, la entidad está negociando con la Con-selleria de Agricultura y Pesca para, en un futuro próximo, construir un hipermercado para vender pescado fresco de la playa de Valencia.

El establecimiento tendría horario comercial y, permitiría, según Domingo, “que muchos consumidores tuviesen más tiempo para poder comprar pescado, además, de gran calidad, por ser tan fresco, y a precios muy razonables”.

Es un proyecto “que se está estudiando” todavía, pero, se preveé que pudiera estar listo para finales de 2009.

En cuanto a su ubicación, Domingo apuesta la zona más próxima al recinto portuario “podría ser la calle Doctor J.J. Dominé o el final de la Avenida del Puerto, no obstante, el sitio concreto no está definido, lo más importante es que el proyecto pueda ser realidad algún día”.

Además, el representante de los pescadores considera que esta medida “es muy necesaria” ya que, actualmente, “sólo la gente mayor compra pescado de las playas, la gente más joven no tiene tiempo para comprar fuera de los horarios y recintos comerciales. El consumo es mucho menor que antes”.