Y es que a los camiones que no han salido a trabajar por estar en huelga, hay que sumar los vehículos de otras asociaciones que, aún afirmando durante la semana anterior que trabajarían, han preferido no hacerlo por “prudencia”, según fuentes de unas de estas asociaciones.

Esto ya se ha comenzado a notar en el movimiento de contenedores en el interior de las terminales. Como ejemplo, valgan los alrededor de 25 camiones que se operaron en Marítima Valenciana desde las 6 hasta las 12 horas de ayer, cuando en un día normal de actividad puede llegar gestionar hasta 2.100 vehículos. En ese sentido, desde fuentes de Transcont declararon a este períodico que “se nos ha informado que en el interior de las terminales se está contratando menos personal que el habitual”. Sin embargo, fuentes del Comité de Empresa de SEVASA desmintieron este extremo, y confirmaron que “los manipuladores y clasificadores se encuentran trabajando a un ritmo nomal”, y que la pasada noche “se continúa con la misma previsión de capataces y personal”.

En el resto de los puertos de interés general de la Comunidad Valenciana, Castellón y Alicante, también se han registrado descensos en la actividad del transporte terrestre. En el caso de Alicante, la Asociación de Transportistas de Contenedores del puerto de Alicante (ASTRACO) decidió apoyar los paros.

En el puerto de Barcelona, por su parte, la situación es similar al de Valencia, ya que se ha registrado un actividad mínima tanto en los accesos como en las terminales.

La mayoría de las asociaciones de transportistas, al igual que el Ministerio de Fomento,
esperan que la reunión que se va a mantener en el día de mañana sea “definitiva” a la hora de desbloquear la situación. Desde el Gobierno ya se ha puesto encima de la mesa un paquete de medidas que deberá recibir el visto bueno de los transportistas. A pesar de que ya ha habido una rotunda negativa al establecimiento de tarifas obligatorias, Fomento ha dejado claro que sí está conforme con ir revisando períodicamente los precios del gasóleo, con el objeto de que puedan repercutirse en el servicio que prestan los transportistas.

Abastecimiento
A pesar de haber transcurrido solo una jornada de huelga, los paros ya se dejan notar en los principales centros de almacenamiento y distribución de mercancías. En el caso de Valencia, desde la Federación de Asociaciones de Mercados Municipales de la Comunidad Valenciana se señaló que los establecimientos trabajan “bajo mínimos”, con lo que “no se puede garantizar que mañana -por hoy- se pueda dar servicio al público”. Por su parte, Mercavalencia registró una entrada “menor” del número de camiones que la realizada un día ordinario y espera que “a medida que pasen los días el problema se agrave”, según informaron fuentes municipales.

El panorama a nivel nacional no es muy distinto. Los mayoristas de algunas mercancías afirman que durante esta semana, de prolongarse los paros, se podría llegar a una situación de “menor oferta” que la que se encuentra normalmente.

Las repercusiones de los paros, además de las que se están empezando a notar en los centros de abastecimiento, podría influir en el cierre de pequeñas empresas de transporte.

Según fuentes del Ministerio de Fomento, la huelga “podría ser la puntilla para muchas compañías”.