En la mañana de ayer tuvo lugar el traslado de la cuarta y última pieza del puente móvil del puerto de Valencia, que cambia su ubicación con el objetivo de formar parte del circuito urbano de Fórmula 1.
El acto fue presidido por el Conseller de Infraestructuras, Mario Flores, que estuvo acompañado por el presidente de la Autoridad Portuaria de Valencia, Rafael Aznar y el director general del puerto, Ramón Gómez-Ferrer.
El conseller reconoció estar “encantado por cómo está quedando todo lo que es el circuito”.
Flores aprovechó su visita al puente para comprobar también el resto del circuito, la parte de la Marina, la prolongación de la Alameda y la Avenida de Francia, de lo que comentó que se va a proceder a montar la parte fija, y posteriormente las gradas y las defensas puesto que” -recordó- “es un circuito desmontable”.
El conseller comentó que se ha realizado “un PAI con el objetivo de compatibilizar los eventos y la vida diaria de los ciudadanos”, además de conseguir “que Valencia esté unida con el puerto”.
En marzo, más
Mario Flores señaló que se están cumpliendo los plazos y, “si todo sigue así, en marzo podremos ver algo más de lo que será el circuito, que estará listo mucho antes del 24 de agosto”.
Y es que el objetivo de su Conselleria es “finalizar las obras con tiempo suficiente para poder solucionar los imprevistos que siempre aparecen a última hora”.
El conseller concluyó diciendo que, una vez esté construido el circuito, “será la Federación Internacional de Automovilismo quien certificará y dará el visto bueno”.
Por otro lado, Rafael Aznar apostilló que el traslado del puente “estaba concebido como la mejora del noroeste del puerto para unir las dársenas”.
También señaló que los plazos se estaban cumpliendo y que de esta forma, “el puerto ha demostrado que colabora con la ciudad”.
Para Aznar, ayer era un “gran día, puesto que el puente cambia su configuración estructural, y podrá soportar mucha carga además de ser un puente bello, que no entra en conflicto con el edificio próximo de Veles e Vents”.
Pieza a pieza
El presidente de la APV explicó también que el traslado “pieza a pieza del puente levadizo ha sido complicada y que implica una preparación, porque todo tiene que funcionar bien una vez acoplado”.
Además, el presidente de la Autoridad Portuaria señaló que representantes de puertos del Estado, acudirían a comprobar el plan directo del traslado.
Un traslado de más de 11 millones de euros
Con un presupuesto de 11.015.266,19 euros y un plazo de ejecución de 8 meses, el puente levadizo ya está en su nueva ubicación. El traslado fue adjudicado el 27 de septiembre de 2007.
En cuanto a las dimensiones del puente, la longitud original eran 125 metros, mientras que la longitud del nuevo tablero es de 140.
El acero estructural alcanza los 842.918,00 kilogramos, y además tiene 1.922,00 m2 de pantallas de hormigón.
La profundidad de su cimentación es de 38 m2 y la longitud total de muelles remodelados es de 150 metros.
Por otro lado, la superficie de los recintos en m2 se cifra en 3.787,00.
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