A falta de poco más de siete meses para esta prueba, el acondicionamiento de los alrededores del recinto portuario y de la nueva Marina Juan Carlos I, cuyas obras fueron adjudicadas a la UTE integrada por Obras con Huarte Lain (OHL), Ecisa y Construcciones Lujan con un presupuesto de 9,5 millones de euros, se encuentran en una fase de ejecución de más del 25% de las actuaciones.
El circuito rodea la Dársena Interior del puerto, ocupando las zonas que actualmente se destinan a viales, espacios libres y zonas de muelles con una extensión de tres kilómetros.
Esto supone que estas zonas deben adecuarse a este nuevo uso, que a la vez debe ser compatible con el de ocio que se pretende para esta parte del puerto.
Tinglados 4 y 5
Recientemente, el Ente Gestor de la Red de Transporte y de Puertos de la Generalitat (GTP) ha sacado a concurso las obras de construcción de los boxes y la zona VIP del circuito, entre otras dotaciones, que estarán situados en los tinglados 4 y 5 del puerto de Valencia.
Las actuaciones cuentan con un presupuesto global de 15 millones de euros y ocuparán una superficie total de 15.500 metros cuadrados.
En concreto, en el Tinglado número 4 se ubicarán los boxes de los diferentes equipos, es decir, la zona de trabajo durante el gran premio. Además, en este conjunto, que ocupa una superficie de 8.545 metros cuadrados, se instalará la oficina del director de carrera y el control técnico.
Mientras, en el Tinglado número 5 se instalará un centro médico, el parque cerrado, el área destinada a los equipos de bomberos y las unidades de emergencia y seguridad. La superficie de esta zona es de 6.971 metros cuadrados.
Paddock
Asimismo, GTP licitó a mediados de noviembre la contratación de las obras del 'paddock', aparcamiento e instalaciones complementarias por un importe máximo de 3.193.005 millones de euros. Su finalización se prevé para finales de este mes.
En todo lo que se conoce como Marina Juan Carlos I ya se puede dar casi por finiquitado el paseo interior, que había hecho las delicias de ciudadanos y visitantes durante la America’s Cup, y que había visto reducir su utilidad durante los meses siguientes, cuando los barcos entraron en el dique seco.
Asimismo, se está procediendo a la demolición de todo el mobiliario urbano. Rotondas, jardines, bordillos y todo cuando sobresalga se retirará para igualar el terreno. En este sentido, uno de los movimientos más espectaculares en toda esa zona es el traslado de docenas de palmeras, que están siendo arrancadas para replantarse en otras zonas.
Las obras también afectarán a la verja exterior del puerto, que caerá en toda la zona que sea necesaria, ya que se pretende hacer del puerto un espacio totalmente abierto. También han caído bajo la piqueta las gradas del canal, sobre la que muchos veían pasar los barcos cuando se encaminaban a las regatas.
Respecto a las bases de los desafíos, también se verán afectadas. Una de ellas es la del Alinghi. Precisamente, junto al desafío suizo hay que drenar una buena parte de embarcadero para poder ampliar la calzada y permitir así circular a los monoplaza.
El 31 de mayo es la fecha límite para la entrega de la obra del circuito de Fórmula 1 en la Dársena. A partir de ese día, el puerto de Valencia habrá cambiado su imagen de una manera notoria. Todo para ser objeto de las miradas de cientos de millones de espectadores en un evento que magnificará su proyección internacional.
PUENTE GIRATORIO
El traslado se llevará a cabo a finales de este mes
En la Dársena Interior del puerto se está realizando la obra más espectacular: el traslado del puente levadizo para su reconversión en giratorio, que está previsto que se realice a finales de este mes. El proceso comenzó el pasado mes de octubre con su adjudicación por 11 millones de euros a la UTE formada por las empresas Dragados, Flota Proyectos Singulares y Construcciones y Estudios, mientras que fue a mitad de diciembre cuando se iniciaron las obras de desmontaje del puente, inaugurado en 2002 para desviar el tráfico ferroviario que rodeaba la Dársena Interior.
Sin embargo, el puente sólo funcionó tres años por las obras de la nueva bocana y el canal para la celebración de la America’s Cup y ahora se trasladará a una zona del canal más cercana al mar, después del edificio 'Veles e Vents', para formar parte del circuito urbano.
Gracias a esta obra, los monoplazas podrán pasar de un lado a otro del puerto a una velocidad de 207 km/h y hará posible, a su vez, que el tráfico naval se desarrolle con total normalidad en las instalaciones portuarias mientras se celebre el Gran Premio de Europa.
Los operarios trabajan en realizar el corte inferior de la calzada de las hojas de acero del puente levadizo, que serán reutilizadas en la nueva obra giratoria, que tendrá unos cien metros de longitud y dieciocho de ancho, más lo que mide cada uno de los tirantes de sujeción y la pasarela peatonal que está prevista. El espacio que ahora ocupa el puente será sustituido por una prolongación del muelle actual, lo que supondrá más línea de atraque y versatilidad a la hora de ofertar la dársena para el amarre de grandes buques y veleros.