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El Proyecto Sympic apuesta por el respeto al medio ambiente y la internacionalización
Entre los asistentes a la jornada internacional, se encontraban representadas las Autoridades Portuarias de Baleares, Santander, Cartagena, Alicante y Málaga
VM, 23/11/2007

En la mañana de ayer tuvo lugar la inauguración de la Jornada Internacional del proyecto SIMPYC (Sistema de Integración Medioambiental en la interfaz puerto y ciudad), que se desarrolla en el edificio de la fase III de la nueva Autoridad Portuaria de Valencia (APV).

La inauguración de las jornadas estuvo presidida por Rafael Aznar, presidente de la APV, al que acompañaron Lourdes Bernal, concejala de Sanidad, Contaminación Acústica y Laboratorio Municipal del Ayuntamiento de Valencia y Jesús Poncela, subdirector de Seguridad y Medioambiente del Organismo Público Puertos del Estado. pic

Todos ellos coincidieron en afirmar que el objetivo fundamental del desarrollo del programa Simpyc es lograr una reciprocidad entre lo que es el puerto y la ciudad en que se ubica.

En este sentido, Rafael Aznar defendió el “compromiso de la Autoridad Portuaria con el desarrollo sostenible”, además, de con todo lo que supone el concepto de “internacionalización, pero siempre en el marco del compromiso con el medioambiente”.

Aznar quiso remarcar que el proyecto de ampliación del puerto de Valencia era imprescindible,
pues “en 2015 esperamos que el tráfico supere los 600 millones de contenedores, y que el
20% de mercancías que hoy traspasa fronteras se convierta en un 80% dentro de unos 15 años”.

El presidente de la APV recordó que el compromiso con el medioambiente cumpliría, en Valencia, una triple estrategia, que incluye “el crecimiento urbano, el respeto por el medio ambiente y la responsabilidad corporativa” que deben tener las administraciones públicas y todos los sectores que intervienen en el proceso.

Por último, Aznar declaró que el “SIMPYC supone un paso más de respeto al medio ambiente y a una política sostenible, enmarcada dentro de las políticas de la Unión Europea”.

Lourdes Bernal quiso remarcar que Valencia “se ha convertido en un punto de referencia
mundial por su ayuntamiento, sus playas o sus grandes eventos, que ha crecido mucho en los últimos 15 años siempre comprometido con criterios de sostenibilidad”. La concejala apuntó que el Simpyc intenta “integrar el puerto en el conjunto de la ciudad”, pero siempre dentro de las preocupaciones que la APV y el Ayuntamiento comparten, es decir, “el reto de terminar con la contaminación acústica y atmosférica”.

Por último, Jesús Poncela expuso la idea de que el puerto “como simple puerto de paso de mercancías es un concepto ya superado, y que por tanto hay que aceptar el desarrollo tremendo del tráfico marino y aceptar las nuevas tecnologías de barcos e instalaciones”.

Comentó que se traduce en “dos esfuerzos, la búsqueda de expansión exterior y las grandes obras con consecuencias medioambientales”, como es el caso del puerto de Valencia.

Proyecto Simpyc
Federico Torres, director del proyecto Simpyc, quiso remarcar las primeras conclusiones del proyecto, que finaliza el próximo enero. Del primer análisis realizado, que estudiaba las variables del ruido, calidad atmosférica y el aspecto paisajístico, se desprende la población afectada por el interfaz puerto-ciudad y los problemas de los puertos participantes, que resultaron Livorno, residuos y calidad del aire, Toulon, residuos y calidad de las aguas, Valencia, calidad del aire y tráfico rodado y Dénia y Vilajoiosa, gestión de residuos y tratamiento de aceites. A partir de ahí, se está a la espera de establecer un consorcio que permita las ideas perduren en el futuro.

En cuanto al impacto visual, Torres destacó la creación de una guía que establece criterios únicos sobre vallados o señales, para unificar.

El primer análisis, que pretendía conocer el estado de la integración del puerto en la ciudad, contó con la participación de cuatro agentes fundamentales. Los cuatro colectivos analizados fueron: los trabajadores del puerto, los residentes de la zona, los visitantes ocasionales y sobre todo los jóvenes, a los que se podía llegar con acciones de divulgación.

Después de los análisis, a cada uno de los colectivos se la plantearán unas soluciones. Torres comentó que, por ejemplo, “para los más jóvenes hemos editado un cuadernillo que les sensibilice en cuanto al tema del medioambiente”.

Tareas de divulgación
Supone uno de los elementos fundamentales puesto que el estudio “pretende ser estímulo para otros recintos portuarios” mediante foros, folletos o reuniones de trabajo, que han sido posibles “gracias a la colaboración de la Fundación Comunidad Valenciana”, según matizó el director del Simpyc.

Como conclusión, Torres señaló que el Simpyc es una “buena herramienta no sólo para buscar el desarrollo urbanístico ni para desarrollar las zonas de ocio, sino para hacerlo respetando siempre el medioambiente”.



 

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