Antolín Goya: “El IV Acuerdo Marco dará al sector de la estiba una gran estabilidad”
En declaraciones a este diario, Antolín Goya no escondía su satisfacción por la consecución de este principio de acuerdo, y espera que tanto la Asamblea General que el sindicato debe celebrar el próximo 26 de julio como la misma ANESCO ratifiquen lo que ya se ha firmado. De ser así, el IV Acuerdo Marco para el sector de la estiba tendría una vigencia de siete años, siendo válido hasta el próximo 31 de diciembre de 2014.
En ese sentido, Goya afirmó que si el III Acuerdo había servido para consolidar al mundo de la estiba, lo firmado a principios de semana no hace más fortalecer lo hecho hasta el momento.
“Hemos dado a las empresas un gran aliciente, que es el de la estabilidad. A lo largo de los próximos años, el cumplimiento de lo que se ha acordado nos va a proporcionar a todos una gran seguridad”.
De esta forma, el secretario general de Coordinadora reconoció que “este es un gran momento en el que las empresas estibadoras y los agentes implicados van a poder hacer grandes inversiones en los puertos españoles, con el objetivo de hacerlos más fuertes e importantes que es, a la larga, lo que todos perseguimos”.
En el ámbito laboral, las mejoras que se han introducido son sustanciales. Para Goya, uno de los apartados que más olvidados estaban, el de la formación, ha encontrado un gran desarrollo en este preacuerdo, además de que se ha dado forma jurídica a algunas cuestiones como los descansos de los estibadores o los dobles turnos.
Por otro lado, este texto también reconoce las figuras empresariales por las cuales las compañías estibadoras podrían establecer fórmulas de ahorro en cuanto a los procesos de selección, formación y salarios de los trabajadores.
Sin embargo, y aunque parece que el IV Acuerdo Marco está cada vez más cerca, aún se desconoce la posición que el Organismo Público Puertos del Estado podría llevar a cabo. Y es que hay que recordar que el abanadono por parte de este organismo de la anterior mesa negociadora puede dar al traste con lo acordado entre los representantes de los trabajadores y los empresarios.