El Consorcio descarta la construcción de viviendas en la futura Marina del puerto
Según la actual Ley de Puertos, cualquier suelo de uso público queda libre de la construcción de viviendas salvo que se lleve a cabo la desafección de dicho suelo.
El Gobierno Central no tiene intención, de momento, de cambiar dicha norma. Sin embargo, la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, no quiso cerrar ninguna puerta, y afirmó que se convoca el Concurso Internacional de Ideas “para oir propuestas y escuchar ideas”. De esta forma, aunque Barberá no lo reconoció abiertamente, la construcción de viviendas no es imposible, ya que se podría desafectar el suelo.
Polémicas aparte, las bases del Concurso fijan un terreno de actuación, incluyendo el PAI del Grao, de 1,35 millones de metros cuadrados, además de unos 565.000 metros cuadrados de agua.
De esta forma, el Consorcio ha propuesto diferentes usos que podrían tener esa superficie. El primero de ellos es el residencial, que quedaría delimitado a lo que será el PAI del Grao. Según las bases, el resto quedará al criterio de los concursantes y del papel que pudiera jugar la Autoridad Portuaria de Valencia a la hora de desafectar terrenos que en este momento son de dominio público.
Además, se establece un uso de dotaciones públicas y privadas. O lo que es lo mismo, la intención del Consorcio es dotar al puerto de Valencia de vida empresarial, a ser posible destacando los usos terciarios portuarios. De esta forma, y a imagen y semejanza de otros puertos europeos, podría crearse un gran centro empresarial en el que las compañías de clara actividad portuaria (consignatarios, navieras, trasitarios, etc) tuvieran su espacio dentro del recinto portuario.
Asimismo, los proyectos presentados deberán contemplar la construcción de la Escuela Municipal de Vela, un varadero para grandes yates, zonas verdes, e incluso, también como era de esperar, de comercios, zonas de ocio y hoteles.
Vertebración
Por otro lado, otro de los principales objetivos será el de vertebrar toda la zona portuaria con la ciudad de Valencia. En ese sentido, se procederá a la eliminación, después de la celebración de la America’s Cup en 2007, de cualquier elemento que impida dicha vertebración. Así, se adelantó que la valla que actualmente separa la calle J. J. Dómine de la Dársena Interior se eliminará.
El otro gran objetivo es el de la conservación de grandes elementos arquitectónicos tradicionales que han dado una imagen de “grandeza” al puerto de Valencia. Es por esto que los proyectos que se presenten deberán tener en cuenta la rehabilitación de los Tinglados del Puerto, el Edificio del Reloj, el Edificio de la Aduana.
Además, el proyecto ganador deberá tener en cuenta la reubicación definitiva de la flota pesquera, que deberá completar, además, la construcción de una Lonja.
Por otro lado, y tras la celebración de la America’s Cup, las bases colindantes a los Tinglados 3 y 4, además de la base del Luna Rossa, se desmantelarán.