A inicios de los 70, el aumento paulatino del tráfico de contenedores en Valencia -gracias a la apuesta de Perfecto Palacio y los dirigentes de la Autoridad Portuaria en la época- iba a evidenciar una escasez de instalaciones en la dársena para concesiones operativas y facilitar la llegada de diferentes navieras que meditaban instalarse en la ciudad. Es por eso que la Junta del Puerto convocó un concurso público para la concesión de la Gestión de los Servicios Públicos de Manipulación de Contenedores, que finalmente fue concecido a Marítima Valenciana en noviembre de 1972, año en que se movieron 11.604 contenedores.

Plano aéreo de las obras de construcción de la Terminal de Contenedores en la dársena sur

Es el primer paso para la inauguración, con la escala del buque “Sally Stove” y la descarga de 73 containers, de la terminal de contenedores en la zona sur del Puerto. En ese primer ejercicio, se aumentó la manipulación de contenedores a 14.500, el 76% de los que se movieron en Valenciaport en el 73. Fueron, en total, 149.233 toneladas movidas en la terminal frente a las poco más de 170.000 gestionadas en el total del recinto portuario.

Instalaciones de la terminal en sus inicios, en 1974

La evolución desde ese momento fue exponencial. Al cabo de cuatro años, esa terminal estaba alcanzando la cifra de 35.000 contenedores, las 408.000 toneladas y un total de 381 escalas, con la incorporación de nuevas compañías. Y así hasta 1979, año de puesta en marcha de las instalaciones en la Prolongación del Muelle de Levante.

Los 80, nueva etapa
En este muelle ya se empezó a operar con grúas pórtico, una Liebherr y otra Paceco, que gestionaron 42.000 contenedores y casi 600.000 toneladas de mercancías. El crecimiento era exponencial.

Situación de las instalaciones de la terminal a finales de 1998

Es el momento de la llegada de nuevas compañías que jugaron un papel clave en la internacionalización del Puerto de Valencia. Evergreen y otras empezaron a escalar en el Puerto, y Marítima Valenciana -que había vuelto a ser adjudicataria de la terminal tras concluir el plazo de 10 años de la adjudicación del 72- vive un nuevo período de 15 años con una ampliación sustancial de las instalaciones de la terminal, que pasaron de 65.000 a 149.000 metros cuadrados de superficie, una línea de atraque de 495 metros y un calado de 14.

Durante los siguientes años y hasta bien entrados los 90, la llegada de nuevas compañías internacionales a Valencia y un aumento imparable del tráfico de mercancías llevaron al Puerto a consolidarse. En el 95, toda esta evolución hizo peligrar la capacidad operativa de la terminal por saturación y los dirigentes de la ya denominada Autoridad Portuaria de Valencia decidieron ampliar las instalaciones usando una parte del Muelle Norte.

Es el momento de la Megaterminal de Contenedores del Puerto de Valencia. En 1997 se produjo la entrada en servicio de la primera fase de la nueva instalación y Marítima Valenciana integró los equipos que tenía en los muelles de Levante y Norte en una única explotación al disponer de 1.000 metros de línea de atraque. Esta fecha coincide, precisamente, con el 25 aniversario de la entrada en servicio de la miniterminal, en el 73. Y con ello, con la nueva terminal en marcha y la problemática añadida que conllevó su traslado, es en 1998 cuando se produce el hecho que redondea la historia de hoy: se supera la mítica cifra del millón de TEUs movidos en Valencia -de los que más del 70% pertenecen a la nueva flamante terminal-, casi los 800.000 contenedores y los 11 millones de toneladas de mercancía general.