Algo menos de cuatro páginas ocupa el informe que la pasada semana remitió el Ayuntamiento de Valencia a la Autoridad Portuaria y que ahora se distribuirá desde la institución portuaria a la Abogacía del Estado y los miembros del Consejo de Administración de la APV. Así lo confirmaba el viernes el presidente de Valenciaport, Aurelio Martínez, que aseguraba que el principal problema al que se enfrenta ahora la ampliación y que pone en riesgo la inversión de TIL es el tiempo.

“El principal problema de la Declaración de Impacto Ambiental es el tiempo en el caso de que se paralice la secuencia de construcción”, apuntaba Martínez, que, por su parte, insiste en que de momento se va a continuar con los plazos previstos en el proyecto. “El puerto está dispuesto a asumir cualquier mejora en el que caso de que haya una valoración del impacto y surja esa necesidad. Queremos cumplir todos los requisitos legales. Somos un servicio público para la sociedad”, continuó el presidente.

Por su parte, en el informe remitido a la APV el Ayuntamiento reconoce que no se puede conocer parte de la incidencia ambiental hasta que se ejecute el proyecto, al tiempo que aboga por analizar más en profundidad la afección a la fauna y flora marina a pesar de que no hay indicios de que se ven afectadas por la obra.

Por otro lado, el informe asegura que hay posibilidades que los índices de contaminación atmosférica se podrían ver incrementados en relación a la anterior declaración consideración que el tamaño de los buques y el volumen de tráfico han crecido notablemente desde 2007.

Además, el citado informe del Consistorio señala que el proyecto afectaría al paisaje, modificando sensiblemente el campo visual sobre la playa.

En relación a este último punto Aurelio Martínez recordó que el mismo viernes se bautizaba un buque de MSC en el puerto de Valencia equipado con motor eléctrico, lo que disminuye el efecto en la atmósfera y que esta es precisamente la tendencia actual de las navieras.

En este contexto, Martínez recordó que la de TIL es, sin duda, la inversión más grande que se hará en Valencia en muchos años e insistió en que desde la APV no ese está improvisando:

“Todos los pasos han sido soportados con informes técnicos y jurídicos. El propio abogado del Estado reconoció en el Consejo de Administración que todas las actuaciones se encontraban dentro del marco legal”.

En este sentido, el presidente de Valenciaport asegura que no comprende la actitud del Ayuntamiento, máxime considerando que no existen informes que soporten los argumentos del equipo de Ribó.

“La DIA del acceso ferroviario al puerto de Sagunto ha constado cinco años. Si yo fuera un inversor y ahora me pidieran nuevos trámites que podrían retrasar el proyecto cuatro o cinco años y me ofrecen oportunidades en otros puertos, probablemente me acabaría yendo - reconoció el presidente -. Pero no hay que olvidar que si MSC se marcha lo haría llevándose gran parte del tráfico que ahora se mueve en el puerto de Valencia”. Y es que MSC es el responsable de la mitad del tráfico de contenedores que se manipulan en Valenciaport, unos 2,5 millones de TEU, de los que un millón aproximadamente corresponderían a tráfico de import-export.