El nuevo presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, ya ha hablado con el presidente de la Autoridad Portuaria de Valencia, Rafael Aznar. Así lo confirmó el propio mandatario portuario tras el Consejo de Administración celebrado el pasado viernes.

Miembros del Consejo de Administración

Aznar tildó la conversación como “cordial” y reveló que ambos se emplazaron a un encuentro personal próximo, “aunque sin fecha concreta”, reconoció el presidente del puerto. “Por el momento, sería temerario hacer ninguna suposición al respecto”, afirmó Aznar, que recordó que el nombramiento del presidente de una Autoridad Portuaria es potestad exclusiva del presidente de la Generalitat Valenciana.

Con todo, Rafael Aznar quiso poner en valor el trabajo conseguido en los últimos años, sobre todo en lo referente al crecimiento del puerto de Valencia y su posicionamiento en el panorama logístico internacional. En ese sentido, abogó por mantener la misma estrategia llevada hasta ahora: “Lo lógico es que haya continuidad en la gestión profesional dados los buenos resultados de Valenciaport”. Sin embargo, matizó claramente que “lo de menos son las personas” si se mantiene la misma filosofía.

El del pasado viernes fue un Consejo con cierta expectación, ya que se esperaban algunas caras nuevas, sobre todo la de los alcaldes de Valencia y Sagunto. Aznar confirmó que se había invitado a ambos. “Ribó declinó la invitación por celebrarse el primer pleno tras ser elegido alcalde, y el nuevo alcalde de Sagunto ha llegado con unos minutos de retraso”.

Lo cierto es que sobre el Consejo de Administración de la Autoridad Portuaria de Valencia planean ciertos cambios. Muy previsiblemente los tres nuevos alcaldes de las localidades de Valencia, Sagunto y Gandía pasarán a estar presentes en el órgano directivo. Además, es probable que los representantes de la Generalitat Valenciana también cambien. Ante estos cambios, Aznar quiso poner en valor el buen funcionamiento del actual consejo dado el gran peso empresarial que ha habido hasta ahora.

En otro orden de cosas, el Consejo de Administración dio el visto bueno a las cuentas del pasado ejercicio, que arrojó un importe neto en la cifra de negocio de 120,9 millones de euros, un 2,8% más que en 2013, y un resultado neto de 10,67 millones de euros, un 56,9% más. Estas cifras han sido posibles al aumento de los ingresos y a los ajustes en gastos de explotación.