Ante la creciente preocupación de la comunidad portuaria por los paros convocados por los amarradores, y las consecuencias que tendría en la operativa del puerto, la Autoridad Portuaria de Valencia citó a empresa y sindicatos a una reunión a tres bandas para intentar acercar posturas y buscar una solución negociada al conflicto. La empresa, que sí acudió a la cita, expuso sus posiciones, que pasan por la continuidad del diálogo, y recibió, en principio, el apoyo de la APV, que según fuentes de esa reunión, “ve la propuesta de la gerencia más que razonable”.

Asimismo, desde la empresa se asegura que la parte contraria carece de una contraoferta clara, “y que aún no conocemos las posiciones de los delegados de personal”. En ese sentido, fuentes de Amarradores del Puerto de Valencia aseguraron ayer a Valencia Marítima que la “empresa está ofertando por encima de sus posibilidades. Lo que tampoco queremos es llegar a una situación irreversible”, en referencia a una posible situación de déficit “que no sería buena ni para la empresa ni los empleados”.

Servicios Mínimos
Por eso, se han comenzado a estudiar los preparativos para el próximo jueves, día en que comienzan los paros. Esas mismas fuentes empresariales afirmaron que “vamos a pedir tanto a la Adminsitración correspondiente como a la Autoridad Portuaria de Valencia que se agilicen los trámites para la prestación de servicios mínimos”.

Y en este punto es donde vuelven a enfrentarse las posiciones. Los servicios mínimos, regulados por Real Decreto, establecen que los buques de pasaje, los que transportan mercancías peligrosas y/o perecederas, no pueden quedar sin servicio a pesar de que se convoque una huelga. Pero los sindicatos no lo ven así, ya que afirman que no es necesario establecer este tipo de servicio.