El proyecto constructivo del Muelle de Contenedores de la Ampliación Norte del puerto de Valencia recibía el viernes el respaldo de los miembros del Consejo de Administración de la Autoridad Portuaria de Valencia, en su sesión extraordinaria, con sólo dos excepciones: la del alcalde Joan Ribó y la de Iván Castañón, secretario autonómico de Vicepresidencia de la Generalitat Valenciana.

El proyecto salió adelante con dos votos en contra, los de Joan Ribó e Iván Castañón (Foto APV)

Con unanimidad o sin ella, lo cierto es que Valenciaport “ha cumplido sus obligaciones” y tras meses de informes, trámites y peros saca adelante su proyecto más emblemático: “Se trata de la mayor inversión que se ha realizado nunca en el puerto de Valencia y probablemente en cualquier puerto de España. Nos hemos asegurado de estar lo suficientemente evaluados y documentados. Es vital que estas decisiones no se dejen al albur del enfoque político de uno y otro partido”, aseguraba esta mañana el presidente de Valenciaport, Aurelio Martínez. “Nos hemos basado en informes técnicos, informes que avalan lo que hemos hecho a lo largo de este proceso y si falta algo se hará, como siempre, porque estamos al servicio de las empresas, la economía y los ciudadanos”, añadió.

Martínez aseguró que llegar a este punto supone una “enorme satisfacción” y no pudo dejar de felicitar a la ciudad por ello: “El beneficio real revertirá sobre la ciudad y la sociedad”, señaló. Para el presidente, en ocasiones “la duda se crea si se quiera crear” porque el informe de Transición Ecológica, que el pasado miércoles zanjaba este vía crucis concluyendo que el proyecto cumple todas las exigencias requeridas por ley y que éste es compatible con la estrategia marina, da luz verde a una inversión de 1.564 millones de euros.

Imagen virtual de la nueva terminal, con capacidad para 5 millones de TEU

Aurelio Martínez repasó algunos de los trámites que ha tenido que superar el proyecto, como la propuesta de resolución sobre la aprobación del proyecto constructivo que hizo el puerto y que fue remitido a Madrid para su aprobación o el informe jurídico sobre la DIA que recibió el visto bueno de Puertos del Estado. A estos trámites siguieron el anteproyecto de obras que realizó la APV y que también fue aprobado por Puertos del Estado, el informe de la Abogacía del Estado en el que identificaba claramente a Valenciaport como el órgano sustantivo del proyecto, es decir, el promotor, y es, por tanto, el encargado de valorar si las modificaciones en el proyecto inicial requieren o no una nueva DIA.

El informe sobre el proyecto constructivo remitido y aprobado por Puertos del Estado y el reciente informe de Transición Ecológica cierran este ciclo de arduos pasos hasta llegar a la licitación de la construcción del nuevo muelle, que se prevé que pueda salir en el primer trimestre del próximo año. Ahora el proyecto será remitido a Puertos del Estado y será el Consejo de Ministros el que lo autorice. “Queremos creer que se pueda hacer rápido, con cierta urgencia aunque son malas fechas”, reconoció el presidente. En todo caso, el objetivo de la APV es a lo largo del primer trimestre del año recibir las plicas, valorarlas y adjudicarlas y dejar cerrado el proceso de licitación en 2023. Por otro lado, el director general de la APV, Francesc Sánchez , recordó que el plazo de ejecución del proyecto es de 58 meses, aunque aseguró que “es un plazo generoso y hay mecanismos para acortar esos plazos”. Así, se prevé entregar la primera fase de 1.000 metros y su superficie adyacente al concesionario, TIL, en 24 meses desde el inicio de las obras.

También puede haber variaciones en el presupuesto de licitación. Las obras del muelle se presupuestaron en un principio en 400 millones de euros, pero ha habido una subida de costes generaliza que lo sitúan ahora en 525 millones. Por su parte, TIL podría variar también su presupuesto, inicialmente de 1.040 millones de euros. Sánchez hizo hincapié en que el informe de Transición Ecológica parte de unos estudios y análisis que son similares a lo que se habrían hecho tramitando una Declaración de Impacto Ambiental y repasó algunas de las condiciones que se establecen, un total de 21. Una de ellas supone la obligación legal por parte de la APV de si aparecen en las obras de dragado arenas aptas para las playas cederlas a la Dirección General de Costas para ese propósito. "De acuerdo a los estudios hechos, las arenas no son aptas para playas pero el informe no descarta que pudieran aparecer de manera y establece esta condición. Por nuestra parte ya hemos dado instrucciones al Departamento Técnico para que realice trabajos adicionales de sondeo", explicó el director general de Valenciaport.

Por otra parte, la Dirección General de Costas solicita a la APV que en el Banco de Arenas de Cullera no haga uso de la capa de finos del polígono en el que se está trabajando para hacer el proyecto de regeneración de arenas. “Nosotros no hemos hecho un análisis de este polígono concreto, sino de todo el yacimiento”, aseguraba Sánchez, que recordó que hay alternativas para conseguir el material necesario para el proyecto, como hacer acopio del material de derribo de las obras del nuevo túnel pasante, por ejemplo. Finalmente, el informe hace una serie de puntualizaciones sobre el plan de vigilancia, los materiales utilizados, etc.

Son aspectos que ya recogía la APV en el Plan de Vigilancia Ambiental del proyecto y son condiciones asumibles y lógicas que “se añadirán tanto al pliego como al Plan de Vigilancia Ambiental”.

La terminal
La Terminal Norte será un claro ejemplo de infraestructura que compatibiliza sostenibilidad y crecimiento. Será la más avanzada medioambientalmente del mundo y contribuirá a crear riqueza y empleo. Con esta nueva instalación, el impacto económico del puerto de Valencia supondrá en términos de valor añadido el 2,27% del conjunto de la Comunidad Valenciana y el empleo superará los 44.000 puestos de trabajo. Así, Valenciaport representará el 2,2% de todo el empleo de la Comunidad Valenciana.

Tendrá una superficie de 137 hectáreas y 1.970 metros de línea de atraque, con capacidad para albergar cinco millón de TEU.

Los empresarios, satisfechos con el desbloqueo del proyecto
SALVADOR NAVARRO[/b]
El presidente de la CEV, Salvador Navarro, recordó que la política “debe generar certidumbre y en este caso ha generado bastante incertidumbre”. Siempre defendimos que los técnicos eran los que debían decidir si procedía una modificación. Hoy es una día histórico, no sólo para el puerto, que está al servicio de los ciudadanos, las empresas y la economía, sino un día importante para la ciudad de Valencia.

CARLOS PRADES
Para Carlos Prades, presidente de FVET, este proyecto supondrá más trabajo para el sector y más tráficos y sirve para despejar cualquier duda sobre el puerto que va a llevar la cabecera en el Mediterráneo. “Dejamos claro quién va a ser e futuro de los puertos españoles”, aseguró el consejero.