El Puerto de Tarragona y una treintena de representantes de empresas de la comunidad portuaria se han reunido este miércoles, 28 de abril, en el 'Grupo Medio Ambiente' para compartir ideas y temas de interés común para reducir la huella de carbono del puerto.

Tarragona apuesta fuertemente por el Objetivo 2030 (Foto APT)

Este grupo de trabajo está formado por empresas que realizan su actividad en el Puerto de Tarragona, así como por responsables de Desarrollo Corporativo y Gestión de la Sostenibilidad del Puerto.

Este espacio de trabajo tiene como objetivo facilitar la adaptación y el trabajo de la comunidad portuaria hacia un Puerto más sostenible, compartir temas de interés común y establecer sinergias para avanzar juntos hacia el desarrollo sostenible, la transición energética y la descarbonización.

El Grupo de Medio Ambiente, que se reúne periódicamente, es un órgano participativo
transversal y transparente en el que trabajamos juntos para reducir el impacto ambiental y, especialmente, en la reducción del CO2.

Este tipo de encuentros se enmarcan en el Plan de Sostenibilidad de la Agenda 2030 en el que trabaja el Puerto desplegando, día tras día, acciones para reducir la huella de carbono en el horizonte de 2030.

En la sesión los representantes de los diferentes sectores han estado compartiendo criterios para establecer una colaboración que permita calcular la huella de carbono de la comunidad portuaria en su conjunto y poder establecer más acciones para reducir la huella para 2030 a cero. A la reunión también han asistido expertos de la Universidad Rovira i Virgili para ofrecer asesoramiento metodológico al grupo de Medio Ambiente.

La Autoridad Portuaria de Tarragona (TPA) se ha comprometido a reducir su huella de carbono en un 99% para 2030, tal y como establece el Plan de Sostenibilidad aprobado en julio de 2020, y recientemente actualizado, que incluye medidas como el ahorro de energía, la compra y generación de energía verde y la compensación de emisiones con vegetación autóctona, entre otras.

El grupo ecologista aspira a coordinar una respuesta conjunta para la transición ecológica y el crecimiento sostenible, sumándose así a la apuesta global por una 'Industria 5.0', un concepto que aboga por una reindustrialización orientada a la transición "verde y digital".