Releyendo recientemente el brillante Trabajo de Final de Master en Gestión Portuaria de D. Vicent Palací Descals, responsable de Comunicación del Puerto de Valencia ("Y LOS PUERTOS DESCUBRIERON LAS CIUDADES. El reencuentro entre puertos y ciudades que nunca debieron perder") uno no puede evitar volver la vista atrás y recordar 1989, ¡ya ha llovido!, cuando un ilusionado grupo de falleros de J.J.Dómine-Port, sin ánimo alguno de lucro, decidió lanzar el "Concurso Mundial de Paellas", dirigido a empresas del sector logístico.

El puerto estaba cerrado, pero cerrado, cerrado, con una valla que aun habría de permanecer durante muchos años, hasta que la 32ª America´s Cup transformó todo el entorno. Y Valencia era un sitio lejano al que la gente de los Poblados Marítimos se desplazaba y del que volvía por aquella Avenida del Puerto, de dos direcciones. Sí, hoy nos resulta curioso, pero entonces la gente no iba "al centro", no. Iba y volvía "a Valencia", a esa que desconocía el Puerto, que, permíteme al tópico, amable lector, vivía completamente de espaldas al mar.

Y entre uno y otra, entre el Puerto y la gran urbe, el Grao y sus gentes. Y aquel Concurso Mundial de Paellas, a lo largo de cuyas treinta ediciones precedentes se han encontrado y han disfrutado, hermanados, portuarios y falleros, logísticos y vecinos. Un evento de apertura, de unión, de germanor, Patrimonio Emocional de todos cuantos por él han pasado. Su XXXI Edición está en marcha, sus inscripciones abiertas (www.concursomundialpaellas.com), te esperamos el 6 de marzo.

A estas alturas no es un secreto que una sociedad mercantil, una empresa, ha convocado -pro domo sua, eso sí- la Primera Edición de un evento clonado con tan solo una semana de diferencia. Apoyándose para ello en la muy marinera, portuaria y tradicionalmente grauera falla de "Cadiz-Los Centelles". Sí, amable lector, al final se trataba de cambiar de comisión fallera, de socios, de aliados. Los de Ruzafa, seiscientos nueve años después de lo del Santisim Cristo del Grao, de nuevo con sus ganchos.

Hoy, más que nunca, se hace preciso apoyar a los creadores del evento original, a las Paellas del Puerto, las de siempre, las de la Falla de toda la vida. Gracias a las empresas, casi cien, y profesionales, más de dos mil quinientos, que así lo habéis entendido.

Ilusionados saludos.
Fdo.: José Luis Ortiz Pavía (PEPO)
Pte. Falla Dr. J.J. Dómine-Port