Tropiezos
Estrés vacacional
Avirul, 16/04/2004
Los viajes estresan mucho, la gente dice que se va de vacaciones para relajarse y descansar pero no nos engañemos. Empezamos haciendo las maletas, operación por la que todo el armario ropero de cinco puertas acaba metido en dos bolsas a punto de explotar y que ni La Masa puede mover, menos mal que tuvimos a bien comprar maletas con ruedas.
A pesar de este volumen de ropa que por supuesto nunca te vas a poner en tus vacaciones, siempre tienes la sensación de que te falta algo. Según señalan los expertos esta es una de las preguntas más comunes después del sentido de la vida.
El caso es que como no se te ocurre nada llega el momento de partir, alegría generalizada, “pitos, flautas”, hasta que se produce uno de los mayores momentos de estrés de tu historia. De repente, piensas en cómo te has ido de casa, y... ¡DIOS MIO!!!! No recuerdas haber cerrado la puerta de la calle, pero ya no sólo con llave, es que no recuerdas ni siquiera si la has cerrado físicamente. Los nervios te consumen porque ¿cómo vas a pasar un mes, quince días e incluso una semana, con la puerta de tu casa abierta?.
Te quieres morir, un sudor frío recorre tu cuerpo. No puedes más, lo tienes que comunicar a estos seres que aún conservan la fe en la raza humana y que viajan a tu lado totalmente felices. Este es un momento muy difícil porque además te la vas a cargar, cuando el resto de personas, en el caso en el que vivas con más gente, descubren que conviven con un ser descerebrado que tienen menos responsabilidad que el mosquito de vino (más que nada por lo borrachos que somos). Y en este caso, además cojonero.
Ese miedo es horroroso entre otras cosas porque, tu familia, amigos o personas muy allegadas que se las llama pareja, te están pateando desde que conocieron que todas sus pertenencias (aunque son unos exagerados porque está claro que están todas en las maletas), se encuentran a disposición del primero que descubra con gran alegría y alborozo que en esta finca viven seres totalmente altruistas y desprendidos.