Editorial
El túnel entre los transversales: una necesidad mayor
Los cambios que se van a realizar en las infraestructuras del puerto de Valencia, tanto en la construcción de nuevos recintos, como en la remodelación de las instalaciones actuales, hacen más necesaria la construcción del túnel debajo de los dos transversales que abrigan la Dársena Interior.
Este proyecto ya estaba contemplado en el convenio firmado por la Autoridad Portuaria de Valencia, Ayuntamiento de Valencia, Generalitat Valenciana y Ministerio de Fomento para la ejecución del proyecto "Balcón al Mar". En este acuerdo también se incluirán la construcción y mejoras de infraestructuras como el Acceso Norte, el Acceso Ferroviario por el sur y la Zona de Actividades Logísticas (ZAL).
Ahora, con la designación de Valencia como sede de la Copa América 2007, urge adecuar las instalaciones de la Dársena Interior a las necesidades de esta competición de vela, proyecto que puede peligrar ya que la construcción de la nueva bocana supondrá el cierre de la actual, lo que significa que se unirán los transversales de Levante y Poniente. Esta unión va a permitir que el tráfico rodado, tanto de vehículos como de trenes circule por el mismo lo que podría llevar a que se descarte la ejecución del citado túnel.
Señalar la ejecución de esta infraestructura como más necesaria que otras, se basa en dos fundamentos. Por un lado, todo el tráfico de pasajeros se desplazaría al Muelle de Poniente, donde está actualmente la Terminal de Pasajeros de la Compañía Transmediterránea, ya que la Dársena Interior quedará destinada a buques de recreo y deportivos. Por otro lado, las actuales instalaciones de los astilleros de Unión Naval de Valencia serán destinadas a los buques de crucero, que actualmente alternan las escalas en función de su tamaño en el Muelle de Poniente o en los del Grao o Cabañal.
Este tráfico, que va en aumento en los últimos años, se puede ver aún más potenciado con la publicidad que puede proporcionar la celebración en Valencia de la Copa América, así como las mejoras de las instalaciones turísticas como la Ciudad de las Artes y las Ciencias y la
comunicación con Madrid, en algo más de una hora, mediante la Alta Velocidad.
Todo esto puede suponer un gran movimiento de personas y de vehículos entre la Dársena Interior, el Muelle de Poniente y la Dársena de Cruceros, como se puede llamar a las instalaciones que ocupan actualmente los citados astilleros.
Además, hay que tener en cuenta que el tránsito entre la zona de Levante, donde se va a realizar la ampliación del puerto para el 2007 y la parte de Poniente se van a ver ampliadas, lo que supondrá un cinturón de vehículos cerrando el acceso a las instalaciones para los pasajeros.
La urgencia en la adecuación de las instalaciones portuarias a las necesidades de la Copa América, no nos debe hacer perder el norte sobre las necesidades del puerto de Valencia en este sentido, que va a tener un incremento de pasajeros muy importante y no puede encorsetarse en un cinturón de hierro por los riesgos que conllevaría para la seguridad de estos.