Tropiezos
Pa'tirarse al mar
Avirul, 30/03/2007
De puertas para fuera a lo mejor han engañado a alguien y es posible que los ciudadanos de a pie, esos a los que en vez de abrirse al mar van a acabar arrojándose a él, aún piensen ciertamente que las obras en el puerto de Valencia han concluido y todos tan contentos.
En el sector portuario propiamente dicho, desde luego, no tenemos la misma concepción de la realidad, no porque no queramos tenerla, porque a veces nos gustaría poder engañarnos y vivir en los mundos de “Yupi”, pero se nos desmonta la "paraeta" cuando llegamos por la mañana aquí y después de tener que pasar por el Laberinto del Fauno, con bicho incluido, nos pasamos tres horas hasta poder dejar nuestro coche en algún lugar poco infraccionario.
Porque eso de que el puerto está “limpito” y acabado para que vengan los millonarios de la America's Cup a disfrutarlo es una gran falacia que con sólo asomar un poquito la nariz se descubre con facilidad.
Las obras son interminables, dentro y fuera del puerto, controles policiales a cada paso, mientras que los sentidos de las calles siguen muy alocados y los carriles circulables dentro del puerto, inescrutables. La vida se hace cada vez más difícil para los pobres asalariados del sector portuario, ni que decir tiene que la semana que viene cuando se inicien las regatas esto se va a complicar aún más.
Esta es una idea fácil de constatar. Y si no hablen con las personas humanas que trabajan todo el día dentro del recinto portuario, por ejemplo, los transportistas, ellos les darán la respuesta, creemos que tienen argumentos más que suficientes, no entrando ni siquiera a valorar lo justos o injustos que son.
El caso es que por mucho que digan nosotros no le vemos el beneficio a esto de las regatas.
De seguir así, los valencianos no es que nos vayamos a abrir al mar, es que nos vamos a tirar a él con una rueda de molino atada al cuello, la que nos han colocado nuestras graciosas autoridades, entre tanta obra, que pagaremos todos, y tanta multa que sólo pagamos nosotros.