Editorial
ELTC: Una apuesta para regular el transporte de contenedores
La incorporación de veinticuatro compañías a la Asociación de Empresas de Logística y Transporte de Contenedores viene a demostrar y confirmar la necesidad de regulación y normalización del sector del transporte de contenedores que desarrolla su actividad en el puerto de Valencia.
La entrada de estas firmas en ELTC es una apuesta por establecer y definir una política de actuación a seguir que permita a las empresas afrontar el futuro con optimismo. El planteamiento de los directivos de ELTC de aglutinar al mayor número de empresas en la asociación para poder desarrollar políticas de actuación beneficiosas para las mismas, ya tuvo su primera muestra con la integración de la Asociación de Empresarios Transportistas del Puerto de Valencia. La evolución del sector, debido a los incrementos del tráfico de contenedores experimentado por el puerto de Valencia, ha cambiado sustancialmente: por un lado, han aparecido nuevas empresas de transporte vinculadas a compañías consignatarias o transitarias, debido al volumen que manejan de este tipo de carga, y por otro, han aparecido muchos trasportistas autónomos reconvertidos de otros sectores. Este incremento de flota ha producido una gran competitividad que no solo ha derivado en una mejora de la calidad del servicio sino en una bajada de las tarifas, que ha llegado a situarse por debajo de los costes.
La gravedad de esta situación está motivando estos días reuniones entre los miembros de esta asociación para establecer una nueva tabla tarifaria, que se ajuste a los costes actuales, ya que en los últimos años no se ha producido ningún incremento, cuando los precios de los carburantes han aumentado considerablemente. Aparte de estas reuniones, los responsables de ELTC también están negociando con TRANSCON, asociación que integra a los transportistas autónomos, el establecer nuevos sistemas de colaboración y una politica tarifaria común, que redunde en beneficio de todos.
El sector del transporte de contenedores ha sufrido un gran cambio en los últimos años: por un lado están las empresas de transporte de toda la vida, que han reconvertido sus flotas de transporte de mercancía convencional o general al contenedor, y por otro, la creación de nuevas empresas, que han hecho aquellas compañías que tenían la base de trabajo suficiente para hacer rentables las mismas. Ambas figuras, más la del transportista autónomo, tienen diferentes conceptos empresariales y objetivos económicos. Los primeros, tienen que reconvertir sus flotas y obtener o renovar beneficios. Los segundos pretenden dar un servicio global y cubrir sus necesidades, sin depender de terceros, aparte de rentabilizar sus recursos.
Y por último, los autónomos pretenden amortizar sus vehículos, cubrir gastos y obtener un salario digno. Todas estas demandas, justas en un principio, se quedan en objetivos, ante la gran competencia que existe entre las diferentes empresas, tanto transitarias como consignatarias o navieras, que reducen tanto los márgenes de beneficios, que muchas llegan a entrar en pérdidas. Si a esto añadimos los problemas en la estiba, con las colas de camiones en las terminales, nos encontramos con una situación difícil de sostener. De ahí que los miembros de ELTC llegaran a anunciar paros en el transporte de no solucionarse los problemas portuarios. En estos momentos, continúan las negociaciones entre empresas transportistas y autónomos, para establecer nuevas tarifas de transporte que empiecen a aplicar todos a partir del día 17 de este mes de marzo y que les permita poder salir de la situación de confrontación en que se encuentran en la actualidad.