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Las ciudades portuarias deben conectarse entre sí para posibilitar prácticas de navegación más inteligentes o enfrentar aisladas las crisis climáticas
Un nuevo estudio realizado por SEA20 indica que la colaboración internacional entre ciudades marítimas es una necesidad política para hacer que la navegación sea más conectada y sostenible, y que la creación de una infraestructura marítima amigable con el medio ambiente se convertirá en un interés crucial para los líderes de las ciudades. Las principales urbes marítimas están en proceso de formar SEA20, una red de ciudades para liderar el desarrollo marítimo sostenible y convertirse en la voz urbana hacia la regulación internacional.
VM, 16/12/2019

Con el 90% del comercio mundial transportado por mar y fluyendo a través de puertos, las infraestructuras marítimas son uno de los factores principales en la planificación urbana. El último estudio de SEA20 encuentra una necesidad emergente dentro de las ciudades, el mundo académico y la industria para abordar conjuntamente el problema de las emisiones innecesarias y las oportunidades sin explotar que ofrece la navegación para el futuro de nuestras ciudades. Si bien existe la voluntad, el estudio también revela que la falta de comunicación y colaboración entre diferentes actores marítimos clave, está impidiendo el progreso en un momento en que las señales y el impacto del calentamiento global se están acelerando.

SEA20 es una red de ciudades marítimas que buscan abordar conjuntamente las crisis emergentes relacionadas con la rápida urbanización y los desafíos medioambientales. Hasta ahora, Helsinki, Hamburgo, Rotterdam, el Estado de Washington, Trieste, Luleå, Vaasa y Génova se han inscrito.

Los colaboradores del estudio destacan el intercambio de datos como ejemplo de práctica que supone un aumento de la eficiencia y que es ampliamente adoptada entre otras industrias logísticas, pero que aún no es explotada por el sector marítimo. Por ejemplo, el intercambio de datos podría resolver la congestión en los puertos y reducir drásticamente las emisiones en el área.

“Existe un problema de confianza en el ecosistema marítimo, ya que diferentes partes implicadas tienen diferentes intereses. Las autoridades analizan los problemas desde su punto de vista, la industria tiene su propio ángulo, etc. ¿Pero cómo generar confianza?”, Dice Xiangming Zeng, profesor asociado de la Universidad Marítima de Shanghai, en el estudio.

Según los entrevistados, desde una perspectiva tecnológica existen muchas soluciones hoy en día, pero hay una falta de legislación e incentivos para un cambio acelerado. Otro hallazgo clave es que la industria, el mundo académico y los planificadores urbanos se hacen eco de la necesidad de un mayor interés por parte de la opinión pública, así como de una mayor presión hacia la industria y sus tomadores de decisiones.

"La industria marítima tiene oportunidades enormes y en gran medida subestimadas para los ciudadanos. Es por ello que es importante no solo involucrar a comunidades diversas en la planificación para el sector marítimo, sino también aprovechar su energía como agentes de cambio, principales beneficiarios e individuos que se preocupan por un futuro sostenible ", dice Joshua Berger, Responsable del Sector Marítimo del Gobernador, Estado de Washington.

Existe el consenso entre los miembros de SEA20 de que la necesidad de abordar estas preocupaciones se extiende más allá de las cuestiones tecnológicas. El estudio sostiene que, dado que los océanos son también el ecosistema natural más grande del planeta, la supervivencia de la humanidad como especie depende de su preservación. Por lo tanto, se necesita peso político ahora para desarrollar y desplegar soluciones efectivas.

Las ciudades necesitan unir fuerzas urgentemente
El estudio continúa para concluir que existen necesidades universales compartidas por todas las ciudades marítimas, como la armonización entre trabajadores del sector marítimo e innovadores urbanos, o la racionalización de la toma de decisiones, lo que podría servir de base para un impulso global común. La innovación emprendida de manera conjunta podría hacer que todos los actores clave inviertan en el desarrollo sostenible en todo el sector.

También considera que la estandarización es la clave para un conjunto de soluciones de largo recorrido. Deben compartirse tecnologías y estrategias eficaces entre puertos y ciudades. La lista de casos potencialmente fructíferos ya está creciendo.

“La clave para acelerar la transformación es simple: inyectar nuevos pensamientos, talentos y voluntad política. Las ciudades tienen la capacidad de poner todo esto encima de la mesa, y creemos que es su responsabilidad y de su interés hacerlo. Como potencias emergentes de influencia política global, las ciudades marítimas están en la posición perfecta para hacerlo y pueden ejercer influencia sobre los organismos reguladores internacionales y la propia industria ", dice Risto E.J. Penttilä, CEO de Nordic West Office y coordinador de la red SEA20.

Una motivación continua para la iniciativa es la redacción de principios que unan a sus miembros en una serie de objetivos establecidos. La red SEA20 tiene previsto presentar los primeros borradores de estos principios para septiembre de 2020.
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