La Comisión Nacional de la Competencia denunciaba en el día de ayer una excesiva presencia del sector público en el sector del transporte de mercancías por carretera. Según el organismo, una de las principales características de la actividad del transporte terrestre es “el intenso grado de intervención pública” al que está sometido el sector, tanto a nivel estatal como a nivel autonómico o local.

A través de un informe sobre la posición de la CNC sobre el Anteproyecto de Ley por el que se modifica la Ley de Ordenación de los Transportes Terrestres, hecho público en el día de ayer, afirma que el alto grado regulatorio “ha motivado la presencia de numerosas restricciones a la competencia, en forma de limitaciones a la entrada al mercado y a la capacidad de los operadores ya presentes de competir entre sí mediante la fijación de variables competitivas o el establecimiento de barreras geográficas”.

Por ello, desde la Comisión Nacional de la Competencia solicitan al Ministerio de Fomento “una cuidadosa revisión y adaptación de las normas reglamentarias de desarrollo de la LOTT”, es decir, una mayor unificación de la normativa actual. Así, en ese mismo informe, la CNC exige que “la regulación estatal no posibilite desarrollos legislativos que supongan restricciones injustificadas a la competencia, que fragmentan el mercado e incluso pueden resultar contrarias a las libertades de establecimiento y de prestación de servicios”.

Autorizaciones
La CNC hace especial mención a las autorizaciones para el desarrollo de la actividad en el transporte terrestre de mercancías. Según el informe, Competencia apuesta por la eliminación del requisito de autorización para vehículos de transporte de mercancías por debajo de las 3,5 toneladas.

La Comisión Nacional de la Competencia también reconoce aspectos positivos en el Anteproyecto de Ley, como la eliminación de los artículos 93.2 y 95.3 de la LOTT o la simplificación de la regulación de las actividades complementarias y auxiliares, eliminándose la exigencia de autorización específica para operar tales actividades. Por otro lado, la CNC también considera positivo que “la obtención de una autorización de transporte público habilita expresamente para intermediar en la contratación de estos servicios, lo que amplía las posibilidades de operadores, mejorando así las condiciones de la competencia”.