En las últimas semanas los transportistas españoles vienen soportando con absoluta impotencia las movilizaciones que viene llevando a cabo una parte del sector agrario, con continuos bloqueos en las carreteras, lo que está ocasionando enormes perjuicios económicos al sector del transporte por carretera.

Primero fueron los agricultores franceses los que durante más de 15 días mantuvieron intransitables la práctica totalidad de las rutas internacionales utilizadas por nuestra flota para las exportaciones españolas, muchas de ellas productos hortofrutícolas procedentes de los agricultores españoles, lo que motivó sus lógicas críticas contra sus homólogos galos por las gravísimas pérdidas que dichas acciones ocasionaban al campo español.

Por eso, resulta incomprensible que ahora sean los propios agricultores españoles que antes se quejaban, los que en estas dos últimas semanas estén llevando a cabo idénticas acciones en la red viaria española, colapsando las principales autopistas, autovías y carreteras nacionales que vertebran la península así como las que conectan con la frontera francesa por Cataluña. Es cierto que dichas movilizaciones no son imputables a las organizaciones agrarias tradicionales, que están actuando con responsabilidad en el ejercicio de sus actos de protesta, sino que en la mayoría de los casos los bloqueos en las carreteras son llevados a cabo por grupos de agricultores de forma aislada y sin respetar en ningún momento el legítimo derecho al trabajo de otros sectores profesionales, como es el del transporte por carretera.

Esta situación incontrolada está ocasionando el hartazgo del colectivo de transportistas, a los que una vez más se les utiliza como “rehenes” de conflictos y reivindicaciones que en nada tienen que ver con el transporte, ocasionándoles injustificadamente pérdidas millonarias cada día que ven perturbada su actividad, con las consecuencias que además ello tiene para el resto de sectores económicos y la propia ciudadanía.

Por ello, FENADISMER da un ultimátum tanto al Ministerio del Interior como a la Generalitat de Cataluña para que se garantice en todo momento el derecho fundamental a la libre circulación de mercancías, que permita al sector del transporte poder continuar desarrollando su actividad con normalidad, como lo viene haciendo hasta ahora para poder garantizar el abastecimiento de mercancías a las restantes actividades económicas y a la propia población, actividad que en la actualidad sigue llevando a cabo con enorme dificultad e incumpliendo en la mayoría de los casos la regulación legal sobre tiempos de trabajo máximos en el sector del transporte como consecuencia de las perturbaciones a las que están viéndose afectados los conductores profesionales, con el consiguiente riesgo además de importantes sanciones administrativas por el cumplimiento de dicha normativa.

En el caso de que dichos bloqueos en las carreteras españolas persistan como consecuencia de la acción incontrolada de los agricultores, además de exigir las correspondientes responsabilidades y compensaciones económicas por vía judicial por los perjuicios ocasionados, FENADISMER planteará al resto de asociaciones de transportistas unidad de acción para llevar a cabo acciones en protesta por la inacción de las autoridades españolas en garantizar el normal desarrollo de la actividad del sector profesional del transporte por carretera, un sector fundamental para la economía nacional que transporta más del 90% de las mercancías que a diariamente se consumen en España.