OUIGO, el operador low-fare de trenes de alta velocidad en España, ha protagonizado hace unos días la liberalización de la línea de alta velocidad que conecta Valencia con Madrid tras efectuar su primera parada en la estación València-Joaquín Sorolla.

Las autoridades en la estación de Chamartín (Foto OUIGO)

El viaje inaugural ha contado con la presencia de la Presidenta del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif), María Luisa Domínguez y del Secretario General de Infraestructuras del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Xavier Flores.

Entre las autoridades regionales han acudido al acto de presentación la Delegada del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Pilar Bernabé, y la Consellera de Política Territorial, Obras Públicas y Movilidad de la Generalitat Valenciana, Rebeca Torró.

La compañía inició el 7 de octubre las operaciones comerciales entre València-Joaquín Sorolla y Madrid-Chamartín-Clara Campoamor con una oferta semanal de 35.630 plazas, que conectará ambas ciudades a 300 km/h en 1 hora y 50 minutos. OUIGO operará con su nuevo destino 5 idas y vueltas diarias (10 trayectos), ampliando en 14.252 plazas su oferta inicial tras la petición a Adif de añadir 2 frecuencias diarias a las 3 incluidas para Valencia en el paquete C del acuerdo marco de la liberalización ferroviaria de viajeros.

Tal como comentaba la Directora General de OUIGO España, Hélène Valenzuela, en la presentación de la compañía en la estación de València-Joaquín Sorolla, “hoy escribimos una nueva página de la historia ferroviaria española. Ponemos en marcha nuestra segunda línea y traemos a una nueva ciudad, Valencia, los efectos positivos de esta liberalización que favorece a todos. Venimos a contribuir a la vertebración de España a través de la alta velocidad, pero también a acercar la historia, la cultura y la economía de Valencia y su Comunitat al resto de las autonomías españolas. Queremos proyectar a través de nuestros trenes el efervescente universo emprendedor valenciano a toda España”.

“La experiencia de OUIGO está siendo una historia de éxitos para quienes están convirtiendo en habitual este modo de transporte que antes no siempre estaba a su alcance. Perfiles diferentes están dejando otras modalidades de transporte para venir a la del tren, clave para conseguir una movilidad sostenible que ayude a proteger y regenerar el planeta. Los ciudadanos han respondido a nuestras tarifas accesibles llenando nuestros trenes”, destacaba Valenzuela.