En los últimos días se viene hablando con insistencia de la puesta en marcha del denominado "pasaporte sanitario europeo", esto es, de un documento oficial, que previsiblemente será en formato digital, acreditará la situación sanitaria de su titular a efectos del covid-19 para permitir una mayor movilidad en el seno de la Unión Europea.

De hecho, la pretensión es que la Comisión Europea presente este mismo mes una propuesta sobre dicho certificado de vacunación para los ciudadanos de la Unión Europea según anunció este lunes la presidenta de la Comisaria europea, Ursula von der Leyen, con el objetivo de proporcionar en dicho documento electrónico "la prueba de que una persona ha sido vacunada, los resultados de las pruebas para aquellos que no han podido vacunarse aún e información sobre la recuperación de la covid-19" para de este modo facilitar los desplazamientos de los ciudadanos en todo el territorio de la Unión Europea, ya sean por motivos laborales o de ocio.

En este sentido, FENADISMER manifiesta su preocupación de que el pasaporte sanitario pueda suponer un obstáculo para el normal desarrollo de la actividad del transporte por carretera, especialmente de los conductores profesionales que realizan transporte internacional, teniendo en cuenta que el ritmo de vacunación está siendo aún muy lento en casi todos los países de la Unión y que el colectivo de transportistas no ha sido incluido entre los grupos de vacunación preferente hasta ahora, pese al carácter esencial de su actividad.

Por ello, FENADISMER va a solicitar, a través de su asociación europea UETR, exceptuar al sector del transporte por carretera de la obligatoriedad de acreditar su pasaporte sanitario para sus desplazamientos en el interior de la Unión europea, siguiendo la Recomendación establecida el pasado mes por el Consejo europeo de garantizar para este sector los "green lanes" o corredores verdes libres de restricciones por motivos sanitarios.