El “Tren de Noé” se despide en el puerto de Róterdam tras su larga vuelta por Europa. En este viaje internacional ha cumplido su objetivo: concienciar sobre la importancia de impulsar el transporte de mercancías por ferrocarril y aumentar su cuota hasta el 30% para el año 2030 para proteger el clima.

Parte del Tren de Noe (Foto Transfesa Logistics)

En el acto de clausura, en el que ha estado presente Transfesa Logistics como miembro de la coalición organizadora de la iniciativa (Rail Freight Forward), se han analizado los resultados de una campaña sostenible pionera con el arte como aliado.

El “Tren de Noé” ha hecho parada en 15 ciudades de diez países diferentes, con miles de personas alcanzadas. En su paso por España, 140.000 personas pudieron contemplar estos originales contenedores y conocer los principales datos que avalan a este medio como el transporte más respetuoso con la Naturaleza.

Para Transfesa Logistics, formar parte de esta iniciativa, en su llegada a Madrid y Barcelona, ha sido una gran oportunidad para trabajar en la consecución de un objetivo común en el que es necesario el esfuerzo de todos los agentes del sector y la sociedad en su conjunto.

Todo comenzó en la conferencia climática mundial COP24 hace aproximadamente un año, cuando un grupo de empresas ferroviarias europeas fundaron la coalición Rail Freight Forward, con el objetivo de trasladar más carga al ferrocarril para proteger el clima. Para llamar la atención de la opinión pública sobre este tema, Rail Freight Forward envió un embajador, Noahs Train, de camino por Europa.

El tren inició su recorrido en Katowice (Polonia) con dos contenedores. Desde entonces, se ha convertido en la obra de arte móvil más larga del mundo y la insignia de un fuerte movimiento europeo a favor de la defensa de nuestro entorno natural.

Uno de sus mayores hitos ha sido conseguir que, por primera vez, los competidores en un mercado altamente competitivo como es el de carga ferroviaria trabajen juntos por un cambio modal que garantice un futuro sostenible. Tras su paso por Europa, el Tren de Noé está a punto de zarpar hacia Chile para continuar su labor. Se enviará un contenedor a la Conferencia Mundial sobre el Clima de la ONU COP25. Con él, su mensaje ahora está dando la vuelta al mundo: aumentar el transporte ferroviario al 30% para 2030 y así proteger el clima.