El tráfico de carga aérea en los aeropuertos españoles cerró el pasado mes de septiembre con nuevo acelerón al sobrepasar las 92.400 toneladas y experimentar un crecimiento del 6,1%. Esto deja el acumulado desde el mes de enero en algo más de 764.142 toneladas, casi cuatro puntos más que en el mismo período del pasado año.

La red de aeropuertos españoles aumentó más de seis puntos su tráfico de mercancías (Foto Iberia)

Estos datos confirman que los operadores logísticos aeroportuarios vuelven a coger el pulso tras unos meses de vaivenes. En mayo se creció tres puntos, mientras que junio se cerró con unas pérdidas superiores al 2%. Por contra, el pasado mes de julio se acababa con un aumento superior a los seis puntos, para llegar a agosto con una ligera subida del 1,7%.

A diferencia del mes de agosto, donde únicamente seis aeropuertos cerraron en positivo, esta vez la mayoría de los grandes enclaves de carga aérea del Estado Español vuelven a los números verdes, a excepción de Zaragoza.

El aeropuerto de Adolfo Suárez Madrid-Barajas movió en el mes de septiembre algo más de 47.350 toneladas de mercancías, lo que supone un 9,1% más que lo registrado en el mismo mes del pasado año. Esto deja su acumulado desde el mes de enero en más de 400.000 toneladas, seis puntos por encima de los ocho primeros meses de 2018.

Zaragoza, a pesar de ser el segundo aeropuerto que más mercancías mueve en el mes de septiembre, cierra con un descenso de casi dos puntos y 16.600 toneladas. Desde el mes de enero, el recinto aragonés experimenta un crecimiento superior del 4,2%, con 124.936 toneladas.

En la estadística mensual de mercancías, el aeropuerto de Barcelona-El Prat experimentó un crecimiento superior a los siete puntos, rozando las 16.000 toneladas. El recinto catalán, desde comienzos de año, acumula 128.544 toneladas, dos puntos y medio por encima del mismo período del pasado año.

Vitoria también cierra el mes de septiembre con un considerable incremento de ocho puntos y medio y más de 5.200 toneladas. Estos buenos datos posibilitan que el recinto vasco puede cerrar los nueve primeros meses del año con un crecimiento del 2,6% y 47.116 toneladas movidas.