La Federación Nacional de Asociaciones de Transporte de España (FENADISMER), que agrupa a 32.000 pequeñas y medianas empresas de transporte, participó el viernes en una reunión en la Consejería de Hacienda de la Junta de Andalucía para analizar el impacto de la aprobación en junio del Decreto Ley 1/2012 por el que se incrementa el importe del céntimo sanitario hasta los 4,8 céntimos por cada litro de carburante consumido.

Fenadismer considera que, dadas las ventajas que aplican otras comunidades, los camiones no repostarán en Andalucía

En este encuentro el presidente de Fenadismer, Julio Villaescusa, expuso a la directora general de Tributos, Rosario Gómez García, la realidad empresarial del sector en esta región, del que forman parte 16.669 empresas transportistas, el 15,6% del total de empresas de este sector en el territorio español.

El hecho que el sector del transporte se configure en un 85% por transportistas autónomos y microempresas, que deben hacer frente a una difícil situación, ha llevado a Fenadismer a insistir ante la Administración en la necesidad de que quede exento de la aplicación de este impuesto, de manera que obtenga el mismo beneficio que obtienen otros modos, como el ferroviario o el marítimo. En este sentido, el presidente de Fenadismer puso de relieve el impacto económico que el recargo autonómico del céntimo sanitario supone para cada transportista por un vehículo tipo de transporte de carga general, estimando un consumo anual aproximado de 46.000 litros, con un sobrecoste impositivo de más de 2.200 euros.

No obstante, Fenadismer recuerda que su solicitud no ha sido atendida hasta la fecha y que se ha seguido penalizando al sector con estos 4,8 céntimos por libro, de manera que el transporte terrestre está soportando más del 50% de la recaudación total del nuevo impuesto. Además, Andalucía se sitúa en este sentido a la cabeza en cuanto a la presión que ejerce la Administración sobre el sector, puesto que en otras comunidades se el compensa por el gravamen. De hecho, comunidades como la Valenciana, Castilla-León, Baleares o Navarra, entre otras, han acordado la devolución del impuesto a los transportistas.

Con todo esto, Fenadismer advierte a la Consejería que se podrían perder más de 30 millones de euros al obligar a los transportistas andaluces a repostar en otras regiones con menor presión fiscal.