La capacidad industrial y la innovación tecnológica impulsan la transformación del sector naval
La segunda jornada del 64º Congreso de Ingeniería Naval y Oceánica ha puesto el foco en tres sectores clave: defensa, pesca y energía eólica marina. Diversos expertos y representantes de la industria han abordado los desafíos y oportunidades que enfrenta cada uno de estos ámbitos en un contexto de transformación tecnológica y geoestrategia cambiante.
Estrategia naval para un mundo en tensión
La jornada comenzó con la ponencia de apertura del Almirante Director de Ingeniería y Construcciones Navales de la Armada, Nicolás Lapique Martín, quien destacó la necesidad de modernizar la Armada para responder a los nuevos escenarios internacionales. “El entorno actual camina hacia la bipolaridad y a mares cada vez más disputados”, señaló, aunque insistió en que “la principal herramienta para evitar conflictos es la disuasión”.
Entre los puntos clave expuestos, subrayó la importancia de una Armada con alta capacidad de combate, la incorporación de nuevas tecnologías como los gemelos digitales y la automatización, así como la necesidad de incrementar tanto las unidades como el personal.
Lapique se refirió al Plan Armada 2050, una estrategia ambiciosa para garantizar la relevancia internacional de la fuerza naval mediante el desarrollo de capacidades avanzadas y la integración de nuevas tecnologías. En este sentido, destacó el impacto de la cuarta revolución industrial en el campo de batalla, señalando que la guerra moderna está evolucionando con la incorporación de drones y sistemas autónomos. “Cada vez que se derriba un dron en la guerra de Ucrania, implica un cambio en los sistemas que se utilizan al día siguiente. La cuarta revolución industrial ha llegado al campo de batalla”, afirmó.
Además, resaltó que las fuerzas navales del futuro tendrán en la robótica y la automatización un elemento clave. “El empleo de gemelos digitales permite una rápida comprensión del escenario y facilita la inmediata toma de decisiones”, explicó y avanzó que “el día de mañana tendremos buques autónomos”.
Por otro lado, insistió en la necesidad de que la sociedad española comprenda la importancia de contar con una Armada potente como garantía de seguridad y bienestar para todos los ciudadanos. Para ello, abogó por una industria militar consolidada y con respaldo social e institucional, promoviendo la excelencia y atrayendo talento joven al sector.
En este contexto, destacó la creciente demanda de ingenieros navales en la Armada, considerada una profesión crítica para el futuro del sector. “Necesitamos profesionales altamente capacitados para afrontar los retos tecnológicos de las próximas décadas”, concluyó.
El futuro de la pesca en un mercado global cambiante
El presidente de los Armadores de Vigo, Javier Touza, abordó la evolución del sector pesquero en las últimas décadas, destacando el desplazamiento del liderazgo mundial en la producción pesquera, tradicionalmente encabezado por China, Japón, Noruega, Corea del Sur…, hacia la incorporación de nuevos agentes como India, Vietnam o Malasia. Este cambio ha reconfigurado el mercado global, planteando nuevos desafíos para la industria europea, que ha experimentado un claro retroceso en los últimos años.
En su intervención, subrayó la necesidad de que España recupere protagonismo en el sector pesquero y refuerce su posición en un mercado cada vez más competitivo. Actualmente, el país representa alrededor del 0,8% de la producción pesquera, una cifra que ha disminuido en comparación con décadas anteriores. Touza insistió en la importancia de modernizar la flota con barcos del siglo XXI que incorporen tecnologías sostenibles y más eficientes para competir en igualdad de condiciones con las grandes potencias pesqueras.
También resaltó la creciente relevancia de la sostenibilidad en la industria, insistiendo en que “la pesca tiene un enorme futuro si se gestiona de forma responsable con el medio ambiente”.
La energía eólica marina, un sector en expansión
El director general de Bluenewables, Bernardino Couñago, fue el encargado de abrir el debate sobre la energía eólica marina, un sector en plena expansión en España. Durante su intervención, hizo hincapié en la importancia de la colaboración entre la industria y las instituciones para desarrollar proyectos viables y sostenibles.
Couñago también abordó la cuestión de qué viene después en el desarrollo de la energía eólica marina. “Ahora hay que construir, instalar y operar estos parques”, explicó, señalando la importancia de avanzar en esta fase clave para el sector.
Durante su exposición, presentó diversas simulaciones que han permitido analizar el impacto visual de los parques eólicos, la afección en los puertos y la integración de todos los elementos que implica el desarrollo de la eólica marina en las zonas costeras. Estos estudios resultan fundamentales para garantizar una implantación equilibrada y sostenible de la energía eólica en el entorno marítimo.
Entre los desafíos destacados, mencionó la necesidad de potenciar la capacidad constructiva en acero para la fabricación de infraestructuras- un nicho propio de la ingeniería naval, ha señalado.
“No basta solo con la capacidad de Navantia; la industria debe trabajar unida para consolidar el sector”, afirmó.
Buques al Servicio del Estado: Seguridad y Protección en el Mar
La protección del mar y de quienes trabajan en él fue el eje central de la mesa redonda sobre "Buques al Servicio del Estado". Los ponentes coincidieron en la importancia de modernizar las flotas y adaptarse a nuevos desafíos tecnológicos y operativos.
El Capitán de Navío Miguel Ramón Cuartero Lorenzo, de la Armada Española, destacó que “dependemos del mar para el transporte, la alimentación y la economía, por lo que su defensa es fundamental”. En este sentido, recalcó que España, como miembro de la OTAN y la UE, mantiene “22.500 personas y 20 unidades desplegadas diariamente” para garantizar la seguridad en el mar.
Por su parte, el Coronel Miguel Sánchez Guerrero, de la Guardia Civil, hizo hincapié en la labor de vigilancia, operación subacuática y lucha contra el narcotráfico y la inmigración ilegal. “El 40% de los migrantes que intentan cruzar el Atlántico no lo logran gracias a nuestra intervención”, señaló.
Desde el Instituto Social de la Marina (ISM), José María Pérez Toribio resaltó la labor de los buques medicalizados, indispensables para asistir a la flota pesquera. “Nuestra prioridad es estar cerca de quienes trabajan en el mar, garantizando su bienestar y seguridad”.
José Luis García Lena, Director General de SASEMAR, destacó la misión de Salvamento Marítimo en el rescate de vidas y la lucha contra la contaminación, mientras que Pablo Álvarez Bande, del Área de Dirección Adjunta de Vigilancia Aduanera, subrayó la importancia de controlar permisos e impuestos en el comercio marítimo. Jordi Sorribas Cervantes, director de la Unidad de Tecnología Marina del CSIC, abordó el reto de modernizar las infraestructuras marítimas. “Necesitamos renovar nuestra flota, aumentar capacidades regionales y mejorar nuestros buques de investigación”, explicó.