El grupo DHL ha colaborado con la empresa de tecnología espacial Astrobotic, en la misión comercial Astrobotic Peregrine Mission, que ha partido de Cabo Cañaveral (Florida, Estados Unidos) y que se espera que llegue a la luna el próximo 23 de febrero.

A bordo de la nave viajan 151 cápsulas DHL MoonBoxes con recuerdos de clientes del grupo logístico de todo el mundo. Entre ellos, figuran historias escritas por niños e incluso un fragmento del Everest.

“Esta colaboración supone un hito histórico pues se enmarca en una de las primeras misiones comerciales con destino a la luna y permite a DHL conectar momentos significativos de la Tierra con la luna, para siempre”, argumentaron desde la compañía.

El director global de Brand Marketing del grupo DHL, Arjan Sissing, destacó que su compañía disfruta de “superar horizontes y ofrecer lo imposible” a sus clientes y, con este proyecto, se aventura en el espacio por primera vez "explorando fronteras nuevas". “Esta colaboración no sólo marca el siguiente paso en la innovación espacial, sino que también supone un gran salto para la historia de la logística”, subrayó.

Desde DHL, explicaron que la Astrobotic Peregrine Mission es la primera de una serie de misiones comerciales a la luna que aspiran a llevar hasta el asteroide materiales de entidades científicas, comerciales y gubernamentales.

“Esta misión inaugural es el preludio de una era nueva que logrará que la luna sea accesible para todo el mundo”, apuntó la compañía.

La nave espacial mide 1,8 metros de alto y 2,4 metros de ancho y puede transportar hasta 120 toneladas de peso.