La Federación Nacional de Asociaciones de Transporte en España (Fenadismer) publicó este miércoles un balance del plan de ayudas que el Gobierno central aprobó en 2021 para la renovación de la actual flota de transporte por carretera para vehículos no contaminantes.

Entonces, las Comunidades Autónomas pusieron en marcha un plan con un presupuesto trianual de 400 millones, al amparo de los fondos europeos Next Generation, y cuyo plazo para solicitud de asistencias concluye el próximo 30 de abril.

Ante tal situación, los transportistas han aprovechado el balance de los tres años de ayudas para pedir un Plan Renove que recoja también a los vehículos diésel entre los que opten a recibir las ayudas, ante el “preocupante envejecimiento de la actual flota española”. Y es que el plan inicialmente aprobado está dirigido exclusivamente a la adquisición de camiones o autobuses nuevos eléctricos o de hidrógeno.

Balance
Según los datos de Fenadismer, en estos años la mayor parte de las solicitudes presentadas por los transportistas han ido destinadas al achatarramiento de vehículos, ya que las otras líneas de ayudas para la compra de vehículos propulsados por vehículos eléctricos o de hidrógeno han tenido mucha menos acogida, dada la escasa oferta de este tipo de tecnologías y su elevadísimo coste, hasta tres veces superior a la de los vehículos de propulsión diésel.

De hecho, la patronal asegura que casi la totalidad de las Comunidades Autónomas han agotado ya el presupuesto total adjudicado por el Gobierno para dicha línea de ayudas, dado el aluvión de solicitudes presentadas por los transportistas, a la que podían acogerse todos los vehículos de transporte matriculados con anterioridad al 1 de enero de 2019. El presupuesto disponible para esta línea sólo alcanza el 7% y está concentrado en Extremadura, y Baleares principalmente.

Mientras, tal y como informó Fenadismer, las líneas destinadas a la compra de vehículos nuevos disponen aún de un importante presupuesto sin agotar, de casi el 20%, siendo significativas algunas Comunidades Autónomas en las que prácticamente la mitad o incluso más fondos de la línea siguen disponibles. Es el caso de Baleares, Navarra, Cantabria, Castilla-La Mancha y Extremadura, siendo la práctica totalidad de las adquisiciones de vehículos no contaminantes acogidas a dicha línea realizadas por parte de grandes empresas, pese a que apenas representan el 1% del sector en España.

Por subsectores, dos de cada tres vehículos nuevos objeto de ayuda han sido autobuses (híbridos y eléctricos) pese a que la flota española de camiones en España es seis veces superior a la de buses.

Fenadismer sigue insistiendo en aprobar un Plan Renove que financie la adquisición de
vehículos propulsados por cualquier tecnología, incluidos los diésel de última generación, para contribuir de forma decidida a la mejora del medio ambiente y a la reducción de la actual flota de transporte que arroja datos preocupantes por el importante envejecimiento que ha experimentado en los últimos años, duplicándola en la última década. La media actual de las cabezas tractoras se sitúa en 8,1 años, frente a sólo 4,7 en 2007, y en el caso de los camiones rígidos es de 14,8 años, frente a tan sólo 5,9 en 2007.