El puerto holandés de Rótterdam ampliará a partir de 2011 el área del Amazonehaven y trasladará algunas de las operaciones de la zona de Hartelstrook a Mississipihaven.

Según el director ejecutivo de la Autoridad Portuaria, Hans Smits, ambos proyectos se incluyen dentro de la política del puerto de hacer un “uso óptimo” de sus instalaciones existentes. Así, el Amazonehaven será ampliado de 255 a 305 metros de línea de atraque para que pueda acomodar los buques de contenedores de mayor tamaño que actualmente recalan en el recinto de la ECT Terminal.

Una vez se terminen esas obras, los barcos más grandes actualmente en servicio podrán acceder a Amazonehaven sin problemas.

La Autoridad Portuaria destinará aproximadamente 175 millones de euros a ese proyecto.

Para facilitar esas tareas de expansión y para la puesta en marcha de la nueva planta
energética Electrabel, el operador portuario EMO ha cedido 230.000 metros cuadrados de la terminal que gestiona en Rótterdam.

EMO calcula que la puesta en servicio de Electrabel se traducirá en un incremento de su tráfico y en el uso de biomasa como fuente energética adicional. Como contraprestación, EMO pasará a controlar 115.000 metros cuadrados de superficie en Hartelstrook en Mississippihaven, junto a la terminal Steinweg.

Como parte del acuerdo alcanzado con la Autoridad Portuaria, EMO tiene opción a un espacio adicional de 120.000 hectáreas en Hartelstrool.

Si se recurre a opción, EMO recuperará la totalidad de la superficie cedida para la ampliación de Amazonehaven y para la puesta en marcha de la central eléctrica. Las nuevas instalaciones contarán con conexiones ferroviarias.