La naviera alemana Hapag-Lloyd movió en el primer trimestre de este año un volumen de tráfico de 3 millones de TEUs, un 6,8% más que entre los meses de enero y marzo de 2023.

Sus beneficios, por el contrario, evolucionaron a la baja de 2.032 a 325 millones de dólares en la comparativa interanual.

Los ingresos descendieron un 23,3% hasta los 4.623 millones de dólares mientras que el resultado bruto de explotación (EBITDA) se redujo a la mitad hasta los 942 millones de dólares.

El resultado neto de explotación (EBIT), en su caso, pasó de 1.874 a 396 millones de dólares entre el primer trimestre de 2023 y el primer parcial de 2024.

Desde la naviera germana, explicaron que los costes aumentaron significativamente como consecuencia de la redirección de rutas marítimas hacia el Cabo de Nueva Esperanza para evitar los problemas de seguridad del Mar Rojo.

“Pese a que nuestros resultados son notablemente más bajos que las cifras extraordinariamente fuertes del año pasado, como consecuencia de la normalización de las cadenas de suministro, estamos encantados de haber tenido un buen arranque de año”, sostuvo el director ejecutivo de Hapag-Lloyd, Rolf Habben Jansen.

Con vistas al futuro, la compañía seguirá pendiente de los costes y continuará implementando su Estrategia 2030, centrada en la descarbonización y en la calidad.

Para el conjunto de este año 2024, la naviera prevé lograr un EBDITDA de entre 2.200 y 3.300 millones de dólares y un EBIT de hasta 1.100 millones de dólares.