El grupo A. P. Moller - Maersk ha registrado durante el primer trimestre del año un resultado neto de explotación (EBIT) de 2.300 millones de dólares, una cifra que se ubica muy por debajo de los 7.300 millones de dólares obtenidos en los meses de enero, febrero y marzo de 2022.

Los ingresos descendieron, en un su caso, un 26% interanual hasta los 14.200 millones de dólares, mientras que el resultado bruto de explotación (EBITDA), se situó en 4.000 millones de dólares, algo menos de la mitad de los 9.100 millones de dólares registrados durante el mismo período del pasado año.

"Logramos un resultado financiero sólido en un mercado repleto de desafíos, con un nivel bajo de demanda”, dijo el director ejecutivo de Maersk, Vincent Clerc.

Clerc también apuntó que en lo que resta de 2023 seguirá la tendencia a la baja y detectó en el panorama social de la actualidad algunos de los motivos de la reducción de beneficios: “La visibilidad seguirá siendo baja durante el resto del año y, mientras se normaliza el mercado, seguimos centrados activamente en la gestión de los costes. Conforme nos adaptamos a un mercado que ha modificado radicalmente su funcionamiento, seguiremos respaldando a
nuestros clientes en los desafíos que presente la cadena de suministro", concluyó.