El grupo australiano Toll ha reforzado sus actividades logísticas con la adquisición de la compañía transitaria alemana Andree & Wilkerling (AWG), cuyas operaciones serán integradas en la división ‘Forwarding’ de Toll Group.

AWG, cuya sede central se encuentra en Hamburgo, es especialista en la importación y exportación de mercancías por vía marítima, especialmente para los sectores minorista y de consumo y para las industrias químicas y del metal.

“Alemania es un mercado crucial y un elemento clave para nuestra estrategia de crecimiento en Europa y en Oriente Medio. Seguir reforzando nuestra oferta de servicio y nuestros volúmenes de tráfico nos permitirá competir agresivamente con los principales transitarios del mercado europeo”, aseguró el director ejecutivo de Toll Global Forwarding, Hugh Cushing.

Destacó además que las actividades de AWG se centran en el transporte marítimo de
mercancías con Asia y con Oriente Medio y combinan servicios de grupaje, de contenedor, en importación y en exportación. También es, en Alemania, “uno de los proveedores líderes en cuanto a movimientos semanales de contenedores consolidados con destino al norte de África y a Oriente Medio”, apuntó.

“Esta adquisición fortalecerá la presencia de Toll Global Forwarding en Alemania, el principal mercado logístico de Europa, al incorporar un servicio de transporte marítimo ya consolidado a nuestra oferta de transporte aéreo, gestionada a través de Frankfurt, e importaciones por vía marítima y aérea”, agregó Cushing.

Toll Group ya adquirió en el mes de junio el 40% de las acciones de la firma china Tianjin Anda Logistics, uno de los principales proveedores logísticos del país, especialmente en el área del mercado automovilístico.

“El mercado automovilístico chino es el más importante del mundo y ofrece una inmensa gama de posibilidades para que desde Toll podamos aplicar nuestras amplias capacidades en esa industria”, afirmó el director gerente de Toll Group, Paul Little.

En 2010, la industria automotriz china creció un 32%, con unas ventas totales de 18,6 millones de vehículos, frente a los 11,8 millones de Estados Unidos, indicó la firma australiana.

Según Little, las ventas de vehículos en los próximos años se verán estimuladas por el crecimiento económico y por las inversiones gubernamentales en infraestructuras de transporte terrestre.