La naviera Mitsui OSK Lines ha organizado, en colaboración con la guardia costera japonesa y otras entidades, un simulacro a bordo de su buque “Spirit of MOL” que permitió comprobar la seguridad de sus programas de gestión de crisis ante un asalto pirata o un ataque terrorista.

Durante el ejercicio, la patrullera “Shikishima” de la guardia costera japonesa se apresuró hasta el lugar del incidente y su personal abordó la nave.

Según la naviera, el simulacro fue una “lección valiosa” para los 170 estudiantes que se están formando en el “Spirit of MOL” quienes aprendieron “cómo responder ante una crisis y los pasos que deben seguirse en caso de un ataque de piratas o terroristas”.

Entre otros, participaron en el ejercicio la Asociación Japonesa de Propietarios de Buques, el Ministerio japonés de Infraestructura y Transporte y la División Marítima de la Oficina de Turismo de ese país.

Tras emitir una señal de socorro, los tripulantes del buque adoptaron las medidas de emergencia previstas en esos casos que, entre otras acciones, incluyen derramar agua por las cubiertas y cerrar todas las puertas.

La señal de alerta fue gestionada por el Centro de Apoyo para una Operativa Segura de MOL que intercambió la información con la empresa de gestión del buque y el resto de organizaciones para resolver la situación.

El grupo MOL conduce simulacros regulares con el fin de confirmar que sus programas de seguridad funcionan de forma efectiva y para afinar la habilidad de su personal para hacer frente a las crisis tanto en tierra como en el mar, indicaron desde la compañía.

Por otra parte, la naviera japonesa también ha anunciado el nombramiento de COMARSHIP como su nuevo agente en el creciente mercado marroquí.

COMARSHIP dispone de una “sólida base de negocios” en Casablanca, Agadir y Tánger y, gracias a ese nombramiento, MOL prevé expandir su red global de sedes y operaciones para responder de forma efectiva las necesidades diversificadas de sus clientes.

MOL está representada en Valencia por la firma Transcoma.