La perspectiva de un pasillo ferroviario dedicado a la carga y descarga de mercancías que conecte Asia y Europa será una realidad a principios del ejercicio 2009.

El proyecto está liderado por el grupo logístico alemán Bahn e implica el desarrollo de una red ferroviaria que atravesará estaciones emplazadas en China, Mongolia, Rusia, Bielorrusia y Polonia; teniendo como destino final la conexión portuaria de la ciudad alemana de Hamburgo.

Según fuentes de la firma teutona, el tiempo de transacción de las expediciones entre los dos continentes oscilará en el intervalo de 15 a 18 días.

50 contenedores
El viaje transcontinental más reciente consistió en la expedición de cincuenta contenedores de productos tecnológicos para la marca Fujitsu-Siemens, con una duración de 18 días para unir las ciudades de Xiangtang a Hamburgo.

El vicepresidente de Fujitsu-Siemens en su división alemana, Heribert Goggerle, expuso que “optamos por el carril creyendo que era la mejor opción para unir transporte aéreo y marítimo”. Goggerle comentó que “el transporte de productos por ferrocarril es más flexible y alrededor de un tercio más rápido que por flete marítimo”.

A su vez, el portavoz argumentó que “si lo comparamos con el transporte aéreo, podemos decir que ahorramos alrededor de un cuarto de los costes y reducimos en un 95% las emisiones de CO2”.

Por otra parte, en enero del presente ejercicio se coordinó una de las carreras de prueba del eje de conexión entre China y Europa.

La expedición movilizó contenedores de zapatos, juguetes y productos electrónicos por más un recorrido de más de 10.000 kilómetros durante 15 días.

Desde Bahn comentaron que “el mismo viaje por mar duraría cerca de 30 días”.

La demanda para una línea transcontinental entre el norte de Europa y China viene precedida por las dificultades de embarque de mercancía y los largos períodos de tránsito, que incrementan de forma notable los costes logísticos.

Por ejemplo, el viaje oceánico entre Hong Kong y Copenhague tiene una duración media de treinta días. Con el nuevo carril, una expedición entre Hong Kong y el puerto de Génova tendrá una dirección media de 14 o quince días y el transbordó remoto ferroviario hasta Copenhague estiraría el tiempo de tránsito hasta los 18-19 días.