La milenaria ciudad flotante de Venecia fue escenario el pasado jueves al nacimiento de una nueva criatura marina, el “MSC Música”.

Así definió el nuevo crucero de Mediterranean Shipping Company la gran dama de la interpretación italiana, Sofía Loren, encargada de amadrinar este gigante del mar.

La ciudad de los 150 canales fue testigo de la botadura de este crucero, con casi 1.300 camarotes, 22.000 metros de superficie total, 300 metros de eslora y 90.000 toneladas de peso.

Al emotivo acto de botadura asistieron, entre otros, el presidente de MSC, Gianluigi Aponte y su esposa Rafaela; la hija del presidente, Alexa, con su marido, Pierfrnacesco Vago, director ejecutivo de MSC Cruceros;, el presidente de MSC Cruceros, Francesco Croccia y el viceministro de Transporte italiano, Cesare de Piccole.

La ceremonia de este crucero de nombre artístico, que ha costado 400 millones de euros de construir, estuvo marcada, precisamente, por la música.

La magia y el arte protagonizaron los minutos previos al acto oficial, gracias a la actuación de profesionales del Cirque du Soleil, que amenizaron la espera con actuaciones de ópera en directo, complicados bailes y equilibrios, números de contorsionismo y sofisticadas acrobacias
aéreas.

Asistentes de todo el mundo, principalmente de Europa, pero también de Estados Unidos, Argentina y Brasil, entre otros, disfrutaron de este espectáculo que, al ritmo de la clásica “Carmina Burana” dio paso a los discursos institucionales de la velada.

El primero en intervenir fue Pierfrancesco Vago quien recordó el compromiso de MSC Cruceros de “bautizar dos nuevos buques gemelos a éste en los próximos dos años” y alabó la “labor increíble” de quienes han construido esta nave “con el corazón”.


Asimismo, el director de MSC Cruceros hizo hincapié en la “gran expansión” que ha experimentado esta firma, que atribuyó a la gestión de la directiva y a todos los que “integran la familia de MSC”.

Por su parte, el presidente de MSC Cruceros, Francesco Croccia calificó esta nueva nave de “testimonio de un nuevo mundo y de una nueva comunidad” así como de “algo irrepetible creado en poco tiempo”, ya que su construcción duró alrededor de un año.

Para Croccia, esta nueva línea de cruceros de MSC representa la “italianidad” entendida como “presencia, elegancia y aficacia”. También sostuvo que el “MSC Música” va “más allá” que otras naves” y es una “perfecta armonización de confort y avance tecnológico”.

Croccia alabó la labor de la familia Aponte al frente de MSC y, del patriarca Gianluigi, destacó
su “fortísisma determinación a no renunciar a nada” y su “visión sin fronteras del mundo” que, a su juicio, “son las claves de su éxito”.

El viceministro de Transporte italiano aludió, en su intervención, al “interés” del nuevo gobierno de Romano Prodi por la industria marítima y crucerística a tiempo que alabó la “energía, profesionalidad, cultura y pasión” expresadas en el nuevo buque.

Para De Piccole, el “MSC Música” es una muestra de la italianidad dentro de la globalidad y expresó su deseo de que el gobierno italiano legisle e invierta en beneficio de la competitividad de este sector en el marco de Europa.

Como colofón a la celebración del bautizo subió al escenario la gran dama de la escena italiana Sofía Loren, acompañada de Gianluigi Aponte y del capitán del “MSC Música”, Ferdinando Ponti.

La intérprete, soberbia a sus 71 años, fue la encargada de cortar la cinta que permitió estrellar la tradicional botella de champán contra el caso de este buque.

Loren, que ha amadrinado otros buques de la compañía, hizo referencia a la “emoción” que siente el presiente de MSC “cada vez que ve nacer una de sus criaturas” de quien, además, dijo que “ha dedicado su vida al mar”.

Una explosión de confeti y música, como no podía ser de otra forma, culminaron el bautizo de esta nueva nave, que desde el sábado, surca las ancestrales aguas del mar Mediterráneo.