La naviera Kawasaki Kisen Kaisha (“K” Line) duplicó en el primer semestre de su ejercicio fiscal - entre los meses de abril y septiembre - sus beneficios netos, que pasaron de 399 millones de dólares a 1.203 millones de dólares si se compara el resultado de este año con el del mismo periodo de 2023.

En su caso, los ingresos experimentaron un repunte interanual del 17,9% hasta los 3.532 millones de dólares, mientras que los beneficios de explotación se situaron en 401,4 millones de dólares, un 38,3% más que en el primer semestre fiscal del ejercicio pasado.

A la vista de estos resultados, “K” Line se ha fijado como previsiones financieras para este año fiscal, que culminará el 31 de marzo de 2025, unos ingresos de 6.762,7 millones de dólares, unos beneficios de explotación de 696 millones de dólares y unas ganancias netas de 1.542 millones de dólares.

Desde la naviera japonesa, indicaron que su división de graneles sólidos mantuvo sus resultados gracias a sus esfuerzos por reducir costes y mantener la eficiencia, complementados con el auge del transporte de cereales desde Norteamérica y de carbón y acero con destino a China y la India.

En cuanto al transporte de graneles líquidos, el tráfico se mantuvo firme gracias a los acuerdos de medio y largo plazo relativos al movimiento de gas natural licuado (GNL), gas licuado de petróleo (GLP) y derivados del petróleo, entre otros.

También se mantuvieron estables el movimiento de vehículos terminados y los servicios logísticos prestados por “K” Line, que cuenta con oficinas en España.