La naviera japonesa Kawasaki Kisen Kaisha (“K” Line) logró en el primer trimestre de su ejercicio fiscal - que engloba de abril a junio - unas ganancias netas de 502,8 millones de dólares, prácticamente el doble que en el mismo periodo de 2023.

Asimismo, los ingresos del grupo nipón mejoraron un 21,2% hasta los 1.854,8 millones de dólares, mientras que los beneficios de explotación se situaron en 213 millones de dólares, un 58% más que en los meses de abril, mayo y junio del año anterior.

Según “K” Line, el movimiento internacional de bauxita, mineral de hierro, carbón y cereales favoreció la mejora de los resultados de su división de graneles sólidos. En el caso de los graneles líquidos, los contratos a largo plazo para el transporte de gas natural licuado (GNL), gas licuado del petróleo (GLP) y otros derivados del petróleo generaron un flujo constante de ingresos.

En relación con sus operaciones logísticas y de tráfico de vehículos, desde la naviera destacan su estabilidad durante los meses de abril, mayo y junio.

Los servicios de transporte de contenedores de “K” Line, gestionados por Ocean Network Express (ONE), mejoraron en cuanto a ingresos y beneficios gracias al descenso de la inflación y al incremento del consumo de Norteamérica y Europa, a pesar de los efectos adversos que ha supuesto desviar muchas líneas hacia el Cabo de Nueva Esperanza como consecuencia de la inestabilidad experimentada en aguas de Oriente Medio.

Para el conjunto del ejercicio, que concluirá el 31 de marzo de 2025, desde “K” Line esperan cosechar unas ganancias netas de 1.455,6 millones de dólares, unos beneficios de explotación de 707 millones de dólares y unos ingresos de 7.069,6 millones de dólares.