La naviera Kawasaki Kisen Kaisha ("K" Line) registró entre los meses de abril y diciembre de 2023 - equivalentes a los nueve primeros meses de su ejercicio fiscal - unos beneficios de 495,5 millones de dólares, frente a los 4.272 millones de dólares del mismo periodo del año anterior.

En cuanto a los ingresos, estos experimentaron un descenso interanual del 1,8%, hasta los 4.790 millones de dólares, mientras que las ganancias operativas se contrajeron un 13% hasta los 470 millones de dólares en el periodo abril - diciembre de 2023.

Desde "K" Line, indicaron que su división de graneles sólidos se vio beneficiada por el incremento de la demanda de mineral de hierro de China, aunque el transporte de carbón y acero con destino a Europa experimentó un retroceso.

En el caso del segmento de graneles líquidos, los acuerdos a largo plazo con que cuenta la naviera aseguraron unos ingresos estables. También el movimiento de vehículos terminados se recuperó pese a la escasez de semiconductores y piezas de repuesto.

En cuanto al tráfico de contenedores, gestionado por Ocean Network Express (ONE), este experimentó un declive relevante en cuanto a sus resultados económicos, pese a los esfuerzos por reducir costes y racionalizar las rutas marítimas.
Las previsiones de la compañía naviera japonesa para el ejercicio fiscal de 2023 - que termina el 31 de marzo - apuntan a unos beneficios totales de 703 millones de dólares, unas ganancias operativas de 582,5 millones de dólares y unos ingresos de 6.294 millones de dólares.