Saudi Global Ports recibe el buque "Berlín Express" de 23.664 TEUs
El puerto King Abdulaziz Port Dammam (KAPD) y Saudi Global Ports (SGP) han festejado la llegada a sus instalaciones del buque "Berlín Express" de la naviera Hapag-Lloyd, de 23.664 TEUs de capacidad, el más grande en recalar en la costa este de Arabia Saudí.
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El “Berlín Express” (Foto Hapag-Lloyd) |
Mide 400 metros de eslora y 61 metros de manga y también es el primer porta-contenedores de grandes dimensiones de la naviera alemana equipado con un motor dual, capaz de emplear gas natural licuado (GNL).
Desde el inicio de sus actividades en 2012, SGP ha invertido para desarrollar una terminal de contenedores competitiva a escala internacional. El "Berlín Express" recaló en la terminal 2, que está equipada con seis grúas pórtico y 18 grúas móviles RTG y cuya capacidad anual es de 1,08 millones de TEUs.
El navío transportó hasta Dammam 9.000 contenedores de 20', dentro del servicio AG3 de la naviera alemana que conecta economías emergentes en Asia y Oriente Medio, en concreto Singapur, Hong Kong, Corea del sur, China, Emiratos Árabes Unidos (EAU), Omán y Arabia Saudí.
Economía
La naviera Hapag-Lloyd ha cerrado el primer semestre del año con unos beneficios netos de 3.100 millones de dólares, unas cifras que se sitúan por debajo de los resultados del mismo periodo de 2022, en línea con las expectativas de la compañía.
En concreto, suponen un tercio de las ganancias cosechadas en el periodo enero - junio del año pasado. El resultado neto de explotación (EBIT) se situó en 2.762 millones de dólares, frente a los 9.919 millones de dólares de la primera mitad del año pasado, mientras que el resultado bruto de explotación (EBITDA) se redujo a algo menos de la mitad, con 3.775 millones de dólares.
Los ingresos de Hapag-Lloyd entre enero y junio descendieron un 41% en la comparativa interanual hasta los 10.847 millones de dólares.
Desde el punto de vista operativo, el volumen de tráfico gestionado por la naviera alemana se situó en 5,8 millones de TEUs, un 3,4% menos que en el primer semestre de 2022.
"Una demanda más débil y unos fletes más bajos están teniendo un impacto muy evidente en nuestras ganancias. En un mercado repleto de desafíos, consideramos que nuestro primer semestre del año ha sido un éxito, pues pudimos expandir nuestro portafolio de terminales, al tiempo que impulsamos la satisfacción de nuestros clientes gracias a nuestro compromiso con la calidad", sostuvo el director ejecutivo de Hapag-Lloyd, Rolf Habben Jansen.
Para el resto del año, la naviera seguirá promoviendo su Strategy 2030, que guiará el rumbo estratégico de la compañía hasta 2024.
Asimismo, sus previsiones para el conjunto de 2023 contemplan un EBIT comprendido entre 2.100 y 4.300 millones de dólares y un EBITDA de entre 4.300 y 6.500 millones de dólares.
"Sin embargo, la guerra de Ucrania, la incertidumbre geopolítica, las persistentes presiones inflacionarias y unos elevados niveles de inventario crean riesgos que podrían tener un impacto negativo en estos pronósticos", recalcó.
Hapag-Lloyd dispone de oficinas en España.