La compañía “K” Line Port Service, filial del grupo Kawasaki Kisen Kaisha (“K” Line), ha probado el uso de biodiésel en su remolcador “Aihomaru” en el puerto de Nagoya.

El biodiésel, suministrado por Toyotsu Energy Corporation, se genera a partir de aceite usado de cocina. La combinación de este biocombustible y carburante convencional genera un combustible mixto que puede ser empleado por el sector marítimo, sin tener que modificar los motores actuales de sus barcos.

Así, se contribuye a la economía circular, al apostar por la producción y el consumo local, y se reducen las emisiones de dióxido de carbono (CO2) generadas durante las operaciones.

Durante el periodo de pruebas, se empleó el método de repostaje de buque a buque y se verificó que el uso de biodiésel no perjudica las operaciones y que, efectivamente, se limitan las emisiones de CO2.

En el marco de su estrategia medioambiental “K” Line Environmental Vision 2050 - Blue Seas for the Future, la naviera japonesa se ha fijado como objetivo mejorar en un 50% su eficiencia de CO2 en relación con las cifras de 2008.

“K” Line tiene oficinas en España.