La compañía Worldwide Flight Services (WFS) y la entidad pública Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA) han iniciado un programa de prueba de vehículos autónomos en el aeropuerto Josep Tarradellas - Barcelona - El Prat.

Estos vehículos permiten trabajar ininterrumpidamente y optimizar los recursos

Los vehículos están siendo utilizados para transportar cargas entre el almacén y el área de estacionamiento de las aeronaves, a lo largo de una ruta de 2.300 metros, que no incluye la zona de maniobras de las naves.

Empleando tecnologías avanzadas, el tractor de remolque es capaz de reconocer el entorno, posicionarse correctamente, detectar obstáculos a una distancia de entre 4 y 10 metros y desplazarse sin interrumpir el tráfico, evitando las colisiones.

Este programa piloto de diez semanas se enmarca en las directrices relativas a los vehículos autónomos (AGV) desarrolladas por el grupo de trabajo de Automatización y Digitalización de Operaciones en Tierra de la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA), en el que participa WFS.

Además de WFS y AENA, participan en esta iniciativa empresas especialistas en equipos para el movimiento de mercancías como Faserek, Movvo y Simai.

El uso de vehículos AGV ofrece ventajas, entre ellas, su capacidad para trabajar ininterrumpidamente y la optimización de los recursos. El programa piloto de Barcelona permitirá supervisar la habilidad de esta tecnología para favorecer una velocidad constante y para aportar seguridad, flexibilidad y trazabilidad gracias a la solución de geolocalización aportada por XOPS.

“Hemos seleccionado Barcelona para este programa por la apuesta realizada por Aena en cuanto a automatización y sostenibilidad y porque la ruta que conecta las instalaciones de WFS y la Terminal 1 proporciona un entorno real para realizar estas pruebas. Teniendo en cuenta que WFS gestiona servicios para más de 25.000 vuelos en importación y exportación cada año en Barcelona y 42.000 vuelos en Madrid, los beneficios futuros de la tecnología AGV son evidentes en cuanto a productividad, seguridad y sostenibilidad. Y este programa podrá replicarse en última instancia en aeropuertos de todo el mundo”, afirmó el responsable de Gestión de Proyectos de WFS, Jordi Campderrós.

WFS opera en 160 aeropuertos de una veintena de países.