El segundo aeropuerto de Dinamarca, en Billund, será el 'hub' de carga aérea de la compañía para atender vuelos diarios. En ese sentido, Maersk Air Cargo cerrará un acuerdo con el sindicato danés de personal aéreo (FPU) para cubrir sus nuevas necesidades de personal.

El director de Logística y Servicios del grupo Maersk, Aymeric Chandavoine, destacó que el transporte aéreo es clave para favorecer la flexibilidad y la agilidad de las cadenas de suministro globales ya que permite a sus clientes abordar envíos urgentes y aporta más opciones de transporte para productos de gran valor.

“Creemos firmemente que hay que trabajar de manera estrecha con los clientes. Por eso, para Maersk es clave incrementar nuestra presencia en el mercado del transporte aéreo global con la puesta en marcha de Maersk Air Cargo para atender aún mejor las necesidades de nuestros clientes”, argumentó Chandavoine.

Maersk Air Cargo se combinará con los servicios marítimos y terrestres del grupo con sus soluciones de almacenaje y de trámites aduaneros para generar cadenas de suministro “más resilientes e intuitivas”. La nueva división asume las operaciones de la filial Star Air.

“Maersk Air Cargo es un paso importante de la estrategia de Maersk Air Freight ya que nos permitirá ofrecer a nuestros clientes una combinación única de transporte aéreo integrado con otros modos de trasporte. Vemos una creciente demanda de logística de principio a fin. Por eso, es importante para nosotros reforzar nuestra capacidad e impulsar nuestra estrategia de transporte aéreo”, sostuvo el director de Air & LCL del grupo Maersk, Torben Bengtsson.

En el aeropuerto de Billund, Maersk pondrá en servicio paulatinamente una flota de cinco aviones - dos nuevos B777F y tres B767-300 para mercancías - entre la segunda mitad de 2022 y 2024. Los tres aviones B767-300 conectarán Estados Unidos y China.

Maersk aspira a que un tercio de su volumen global de carga aérea sea transportada por su red propia de servicios.

La naviera Maersk Line cuenta con oficinas en España.

El grupo Maersk se une a la iniciativa SteelZero
El grupo A. P. Moller - Maersk se ha sumado a la iniciativa SteelZero, que conecta a organizaciones internacionales para promover un sector del acero más sostenible en colaboración con la entidad de certificación Responsible Steel.

“El acero es una parte integral de nuestra cadena de valor. Lo empleamos en nuestros barcos, contenedores, terminales y almacenajes y, por eso, es una parte esencial de nuestros esfuerzos de descarbonización. El sector del acero es uno de los mayores emisores de dióxido de carbono (CO2) y es responsable de alrededor del 7% de las emisiones de gases de efecto invernadero. Es imperativo encontrar procesos sostenibles para la fabricación de acero”, afirmó la directora ejecutiva de Flota y Marcas Estratégicas de A. P. Moller - Maersk, Henriette Hallberg Thygesen.

Maersk tiene previsto reciclar durante la próxima década más de 700 buques de más de 4.000 TEUs, en los que el acero supone el 90% del peso de las naves.

“Los volúmenes globales de reciclado de buques se duplicarán en 2028 y se cuadruplicarán en 2044. El acero reciclado será reconocido, progresivamente, como una materia prima viable para las empresas del sector del acero con un objetivo de emisiones cero”, apuntó al respecto de esta estrategia el vicepresidente técnico del grupo, Palle Laursen.