La naviera Maersk Line pondrá en marcha en julio un servicio de cabotaje con el nombre de Maersk Coastal Connect en Nueva Zelanda para favorecer la cadena de suministro y la fiabilidad de los itinerarios marítimos en ese país.

Esta línea supone un hito en los 25 años que Maersk Line lleva atendiendo el mercado neozelandés y ayudará a impulsar las conexiones sostenibles y flexibles de cadena de suministro para importadores, exportadores y distribuidores nacionales.

La ruta estará cubierta por dos buques de 2.500 TEUs – el “Maersk Nadi” y el “Maersk Nansha” – que conectará los puertos de Timaru, Lyttelton, Nelson, Auckland y Tauranga.

El servicio tendrá frecuencia semanal para Timaru, Nelson y Tauranga mientras que los puertos de Auckland y Nelson serán cubiertos cada quince días. Proporcionará, además, conexiones con la red global del grupo A. P. Moller – Maersk.

Esta línea, cuya capacidad entre las islas Norte y Sur y viceversa será de 250.000 TEUs, contará con una tripulación neozelandesa, en apoyo de la comunidad local.

“La pandemia de la covid-19 ha cambiado el mundo de muchas maneras. Una de ellas es que los clientes del sector logístico necesitan cada vez más cadenas de suministro locales y globales más visibles y resilientes. Al poner en servicio dos buques específicos, podemos llevar contenedores vacíos a los lugares apropiados, de manera más eficiente, para atender las necesidades de la exportación”, explicó el director gerente de Maersk Oceanía, Henrik Jensen.
Según apuntó, la configuración del servicio permitirá reducir el impacto de las disrupciones de la cadena de suministro, incluyendo la congestión portuaria, la mareas, el descenso de la productividad portuaria y los retrasos en las estancias en el puerto.

Este servicio, unido a la construcción de unas nuevas instalaciones frigoríficas en Hamilton, creará valor para el mercado neozelandés.

Maersk Line tiene oficinas en España.