La naviera Mitsui OSK Lines (MOL) ha desarrollado conjuntamente con su filial MOL Techno-Trade un sistema nuevo para favorecer el transporte seguro de bobinas de acero dentro de contenedores, con el nombre de MOL Coilporter.

Buque de la naviera

Se trata de una base especial sobre la que se aseguran las bobinas de acero, un material esencial para la industria automotriz, entre otros sectores, y que garantizan la estabilidad durante todo el proceso.

Este sistema es el resultado de la colaboración entre Mitsui OSK Kinkai, Utoc Corporation y MOL Logistics Japan que compartieron con el equipo técnico del proyecto las necesidades del cliente para generar “enfoques creativos” que permitieron desarrollar todos los detalles” de MOL Coilporter, patentado en Japón, indicaron desde la naviera nipona.

Mercancía
Con este sistema, el ensamblaje de la bobina cuesta unos tres minutos, ya que la mercancía se introduce directamente sobre su base dentro del contenedor y no son necesarios equipos
adicionales.

Con el sistema convencional, dos carpinteros trabajan durante una hora para tomar las medidas y definir los listones de madera que sujetan la mercancía.

MOL Coilporter reduce el riesgo de que se dañe la carga y es un sistema reutilizable y reciclable que favorece un uso más efectivo de los recursos, según señala la naviera.

Recordar en este contexto, que la naviera está representada en Valencia por la firma Transcoma.

La naviera MOL refuerza sus beneficios en su ejercicio fiscal de 2019
La naviera Mitsui OSK Lines (MOL) ha cerrado su ejercicio 2019 – que abarcó del 1 de abril de 2019 al 31 de marzo de 2020 – con unos beneficios netos de 306 millones de dólares, que supusieron un incremento del 17% con respecto al año anterior.

No obstante, sus ingresos descendieron un 6,4% en la comparativa interanual hasta los 10.836 millones de dólares. Las ganancias ordinarias de MOL mejoraron un 30% hasta 516,7 los millones de dólares al tiempo que sus beneficios de explotación bajaron un 37% hasta los 223 millones de dólares con respecto a las cifras de 2018.

En el caso del transporte de graneles sólidos, la naviera explicó que las tarifas y los volúmenes de tráfico se mantuvieron estables durante los seis primeros meses del ejercicio pero, a partir de principios de 2020, la demanda se debilitó como consecuencia del inicio de la crisis sanitaria en China.

Desde entonces, este segmento ha visto deteriorarse sus condiciones de mercado. Aun así, mantuvo un resultado positivo, aunque inferior al del año pasado.

En cuanto al movimiento de graneles líquidos, la demanda de petróleo se redujo en la primera mitad del ejercicio pero se recuperó en el segundo trimestre como consecuencia de una menor disponibilidad de buques cisterna y por una mayor necesidad de transporte de gas y ‘diesel oil’.

Esa necesidad deriva de las nuevas regulaciones de la Organización Marítima Internacional (OMI), que limitan el contenido de azufre del carburante pesado.

En el caso del gas natural licuado (GNL), sus servicios de transporte mejoraron sus ganancias, con respecto a las cifras del año anterior, gracias a los ingresos estables generados por los contratos a largo plazo que incluyen ocho buques de nueva construcción.

Respecto a sus servicios de contenedores, aglutinados bajo el paraguas de la Ocean Network Express (ONE), la naviera japonesa destacó que la alianza logró beneficios ordinarios, superando los resultados del ejercicio pasado, gracias a la “estabilización de los servicios, a un tráfico mayor y a unos avances superiores a lo esperado en cuanto a reducción de costes”.