La naviera Kawasaki Kisen Kaisha (“K” Line) ha revisado su estrategia “K” Line Environmental Vision 2050 – Blues Seas for the Future para reforzar sus iniciativas globales en el ámbito de la conservación medioambiental y de la reducción de gases de efecto invernadero.

La compañía japonesa definió este plan en 2015 para plasmar sus objetivos con vistas a 2050 e incluía aspectos como la reducción de la huella medioambiental, la investigación y la introducción de tecnologías avanzadas.

“Pese a que hemos logrado la mayor parte de los objetivos parciales fijados para 2019, incluida la reducción de dióxido de carbono (CO2) y la introducción de una mentalidad sostenible en este plan, hemos visto cambios dramáticos en el medio ambiente y en la manera en que la sociedad y las empresas lidian con la conservación de la naturaleza. Por eso, decidimos revisar esta estrategia”, indicaron desde la naviera.

Esta edición revisada se basa en los resultados del análisis elaborado por la entidad Task Force on Climate-related Financial Disclosures. Se han redefinido objetivos nuevos para 2030 en torno a dos criterios: Descarbonización y Búsqueda de un Impacto Medioambiental Cero.

Así, la compañía aspira a limitar las emisiones de CO2 un 50% en relación con las cifras de 2008, lo que supera los objetivos de la IMO, fijados inicialmente en un 40%.

“K Line seguirá investigando y desarrollando las mejores soluciones, que incluyen tecnologías
nuevas que reduzcan a cero las emisiones de gases de efecto invernadero”, indicó la compañía, que cuenta con oficinas en España.