El secretario autonómica de la Conselleria de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio, Josep Vicent Boira, destacó ayer que “no podemos dejar pasar la oportunidad que supone el Corredor Mediterráneo. La económica valenciana no puede permitirse no exprimir las posibilidades del Corredor Mediterráneo y de los tres puertos valencianos”.

Boira hacía estas declaraciones en la jornada sobre ‘El desarrollo ferroviario en el espacio mediterráneo franco/español’ que se ha celebrado en la Universidad de Perpignan, organizada por FERRMED, la Asociación Energie TGV y la plataforma EU Core Net Cities con el objetivo de concienciar de la situación real del transporte ferroviario del arco mediterráneo franco-español.

En su intervención, el secretario autonómico señaló que la sociedad valenciana “necesita el Corredor Mediterráneo, para tener un proyecto económico viable para los próximos 30 años”.

Según Boira, “la Comunitat Valenciana forma parte de todo el eje mediterráneo, por el que transcurre el Corredor en gran parte, y en el que se ubican los principales puertos del Mediterráneo, por lo que la conexión de Valencia, Castellón y Alicante, con los puertos de Barcelona, Algeciras, Marsella y Génova, es fundamental para que toda la fachada mediterránea se convierta en un nodo logístico clave”.

Asimismo reclamó que, mientras en todo el siglo XX y principios del XXI ha sido la fachada norte, con los puertos de Rotterdam, Amberes o Hamburgo, el centro de la logística europea, “es el momento de que los puertos del sur y con ellos todo el tejido industrial y logístico del sur de Europa se vertebren y se conecten con el corazón de Europa para aumentar su papel en la economía mundial”.

Así, continuó Boira, “igual que el túnel de San Gotardo que cruza Suiza es esencial en las conexiones del centro de Europa, la puesta en marcha del Corredor lo debe ser para las regiones mediterráneas. La regionalización de la producción, debida a la situación global, la ampliación del canal de Suez y el florecimiento de economías como la de Marruecos o Argelia, deben de ser entendidos como oportunidades para toda la fachada marítima europea y española, lideradas por el puerto de Valencia”.

Para Boira, “hay que invertir en infraestructuras, pero en aquellas que sean productivas, que generen valor y permitan un beneficio a largo plazo para la economía valenciana. La Comunidad Valenciana cuenta con un 80% de infraestructuras respecto al resto de España, pero estas son un 7% más productivas que la media estatal”.