La Autoridad Portuaria de Valencia acogió ayer una jornada organizada por el Colegio de Ingenieros Navales y Oceánicos en colaboración con la Autoridad Portuaria de Valencia y la Fundación Valenciaport sobre “El convenio internacional para el control y la gestión del agua de lastre y los sedimentos de los buques: un reto para la industria marítima”.

Asistentes a la jornada

El objetivo de esta jornada era dar a conocer las implicaciones que supone la entrada en vigor de este nuevo convenio, su impacto económico, las alternativas a la instalación de equipos de tratamiento a bordo, los detalles de su implementación en Estados Unidos y las lecciones aprendidas. Durante la jornada se explicó, además, la estrategia que están siguiendo las autoridades marítimas y portuarias para conseguir una implementación exitosa del Convenio en España.

Vicente del Río, gerente de la Fundación Valenciaport; y Carlos Rodríguez Gallo, decano del Colegio de Ingenieros Navales de Valencia; fueron los encargados de inaugurar la jornada. Del Río destacó que las nuevas tecnologías podrán ayudar a implementar este convenio en los buques, y recordó que tanto la Fundación Valenciaport como la Autoridad Portuaria de Valencia han estado siempre atentas a la implementación del Convenio tanto en lo referente a los servicios portuarios que se pudieran derivar como a las infraestructuras portuarias necesarias para poder prestarlos.

Vicente del Río y Carlos Rodríguez Gallo

Rodríguez Gallo, por su parte, reconoció que la implantación del Convenio hoy en día es “confusa”. En 1992 comenzaron las negociaciones para elaborar un convenio común. Dos años después se crea un grupo de trabajo en el seno de la Organización Marítima Internacional sobre aguas de lastre. No será hasta diez años después cuando ese convenio vea la luz, aunque se necesitará un mínimo de 30 países adheridos. Tras once años, este año parece que ya hay suficientes países adheridos, por lo que el Convenio entrará en vigor a lo largo del próximo ejercicio.

Lagunas
Con todo, según Rodríguez Gallo, advierte que aún hay lagunas en su aplicación, ya que Estados Unidos está aplicando unos criterios diferentes a los que se estipulan en el tratado, mientras que Europa en general y España en particular “se encuentran a la espera de que se aplique el Convenio”.

La jornada contó con la participación como ponentes de Elena Seco, subdirectora de ANAVE; Diego García, Country Manager ABS Europe Ltd.; Raúl Cascajo, jefe de Políticas Ambientales de la Autoridad Portuaria de Valencia; Julio de la Cueva, jefe de Área de Nuevos Servicios Portuarios de Puertos del Estado y Miembro del grupo de trabajo de exenciones del HELCOM/OSPAR; María Goretti, jefe de Servicio de Coordinación y Estudios (DGMM); Isabel Segura, AmbientCare COO; Juan Manuel de la Cruz, responsable de Diseño de Detalle de Sistemas en Seaplace y Rafael Rodíguez Valero, director General de la Marina Mercante. Mercedes de Juan, jefe de Proyectos de I+D+i y Ana Rumbeu, directora de Formación, ambas de la Fundación Valenciaport, ejercieron de moderadoras de las mesas.