Demasiado esfuerzo inversor en poner en marcha kilómetros de alta velocidad en detrimento del desarrollo del Tercer Hilo, infraestructura ferroviaria pensada para el traslado de mercancías desde el arco mediterráneo hasta el centro y norte de Europa.

La jornada fue inaugurada por Federico Félix, presidente de PROAVE; Vicente Guarch, director general territorial de Mapfre; y por Juan Carlos Valderrama, subdelegado del Gobierno en Valencia

Esta fue la principal conclusión de la ponencia que desarrolló el doctor en Geografía por la Universidad de Valencia Josep Vicent Boira en el marco de una jornada organizada por Mapfre en Forinvest, que llevaba por título la “Incidencia del Corredor Mediterráneo en la Economía Valenciana”. De hecho se convirtió en la única voz crítica con los planes ferroviarios que el Ministerio de Fomento está desarrollando.

El pasado 14 de diciembre de 2014, el propio Ministerio de Fomento emitía una nota de prensa en la que adelantaba que destinaría en 2015 1.359 millones al Corredor Mediterráneo. Sin embargo, según Boira, estas cifras son algo engañosas. Y es que el 66% de esa inversión va a ir destinada a conexiones radiales y litorales del AVE, dejando un 34% para el desarrollo del Tercer Hilo. “La inversión real para ese tercer carril y por tanto para el transporte de mercancías sería de algo más de 462 millones de euros”, asegura Boira, una situación que tacha como “preocupante”.

Josep Vicent Boira, Federico Félix, Jaime Pallarol y Carlos Vicedo, moderador

Por ello, el catedrático es partidario de redefinir el concepto propio de Corredor Mediterráneo.

“¿De qué estamos hablando entonces?, ¿qué entendemos por Corredor Mediterráneo?”. Las grandes reivindicaciones empresariales hacia esta infraestructura siempre se han referido al transporte de mercancías, una tesis apoyada por el lobby Ferrmed. Sin embargo, a juicio de Boira, las preferencias del Ministerio de Fomento van en otra dirección: “Hay una apuesta decidida por el AVE, cuando el objetivo de Fomento debería ser priorizar el traslado de carga desde la carretera al ferrocarril. La apuesta de Fomento por el AVE debe ser corregida y matizada”. Según las cifras analizadas por el catedrático, el 69% de la inversión de ferrocarriles irá destinada al AVE.

Por tanto, para que el Corredor Mediterráneo sea una realidad y una apuesta de todo el conjunto del Estado Español, hay que hacer una “labor pedagógica muy grande”. “Lo principal”, separar el Corredor Mediterráneo de la alta velocidad y “nombrar a una persona que se dedique en exclusiva a la planificación y desarrollo de esta infraestructura”. En ese sentido, “hay que convencer al resto de España, y en especial a Madrid, de que el Corredor Mediterráneo es fundamental para el desarrollo de la economía española”.

Entre 2008 y y 2013, la Comunidad Valenciana ha perdido un 10% de su PIB, algo que
únicamente le ha ocurrido a Murcia y a Asturias. Para Boira, una de las muchas razones por las que podría haberse llegado a esta situación es la falta de coexiones con los principales mercados nacionales y europeos. El catedrático tildó de “escandaloso” que entre Vandellós y Tarragona aún haya 37 kilómetros de vía única y afirmó que el BBVA, en sus estudios anuales, asegura que uno de los diez pilares en los que la Comunidad Valenciana debe desarrollar su recuperación es la puesta en marcha del Corredor Mediterráneo: “De no hacerlo, la recuperación económica valenciana no será posible”, advierte Boira.

Asistentes a la jornada

Y es que sectores productivos tradicionales de la Comunidad Valenciana como el azulejo, los vehículos y la alimentación “serían mucho más productivos y competitivos de contar con una conexión ferroviaria”. En este mismo aspecto incidió Federico Félix, presidente de PROAVE, que aseguró que el sector agroalimentario, a pesar de haber sufrido la crisis, es de los pocos que ha sabido mantenerse. “Trabajamos con márgenes muy estrechos, y eso nos ha enseñado a ser mucho más competitivos y a apostar de manera decidida por las exportaciones y el comercio exterior”.

Presiones
Félix asegura que el compromiso adquirido por el Gobierno de Mariano Rajoy con el Corredor Mediterráneo es “seguro, serio y verdadero” y reconoció que “si el tercer hilo no está en 2015 y sí a mitad de 2016, tampoco pasaría nada, aunque también es verdad que no podríamos admitir una mayor demora”. Esta realidad contradice el compromiso adquirido por el propio Ministerio de Fomento, que concretó la llegada de ese tercer carril a Castellón y Valencia en 2015 y a Alicante en 2016.

Por su parte, Jaime Pallarol, subdirector general de Transportes y Logística de la Conselleria de Infraestructuras, Territorio y Medio Ambiente, analizó pormenorizadamente todos los proyectos en los que tanto la Generalitat Valenciana como el Ministerio de Fomento y Adif han ido trabajando. Aseguró que el Ministerio de Fomento, en su momento, “decidió tirarse a la piscina” a la hora de convertir España en un país de ancho europeo. “Asumió el hecho de que esta obra habría que hacer la a la vez y de forma simultánea en todo su reocrrido, y asumió también el hecho de que habría que cambiar todo el parque móvil”. 

Sin embargo, Pallarol confesó que las presiones de muchos sectores por el coste económico que supondrían estos cambios “pesó más” en el Ministerio de Fomento, que al final se decantó por el tercer carril.

Durante la jornada también participaron Emilio Orta, presidente de la Asociación Valenciana de
la Industria de la Automoción (AVIA); Isidro Zarzosa, presidente de la Asociación Española de Fabricantes de Azulejos y Pavimentos Cerámicos (ASCER); y Yolanda Atienzar, directora general de Logitren.